Un gastroenterólogo es un especialista encargado de tratar las enfermedades que afectan el sistema digestivo, que incluye el tracto gastrointestinal (esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso, recto y ano), así como el páncreas, el hígado, los conductos biliares y la vesícula biliar.

Según el Colegio Americano de Gastroenterología, “este especialista debe primero completar una residencia de Medicina Interna de tres años y entonces es elegible para una capacitación especializada adicional (beca) en gastroenterología. Esta beca tiene generalmente una duración de 2 a 3 años, así que para cuando los gastroenterólogos han finalizado su capacitación, han tenido 5-6 años de educación especializada adicional después de la escuela de medicina”.

El diario El Universal, en su sección de salud, brinda algunas señales que indican que se debe visitar a este especialista de la salud.

Señales que indican que se debe visitar a un gastroenterólogo

  • Acidez estomacal frecuente: si se padece de este síntoma de manera recurrente es posible que este pueda tratarse por medio de remedios caseros; sin embargo, “si los síntomas de acidez estomacal se presentan más de dos veces por semana, podría ser signo de enfermedad por reflujo gastroesofágico”.
  • Diarrea continua: la especialista menciona que este síntoma podría indicar que hay otros trastornos. “La diarrea crónica nos podría indicar ciertos trastornos digestivos diferentes, como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad intestinal inflamatoria, o sobre crecimiento bacteriano en intestino delgado”.
El cáncer de estómago en etapa temprana no genera síntomas. | Foto: Getty Images
  • Dolor abdominal repentino: si aparece un dolor intenso y repentino sin razón aparente, este síntoma podría indicar que se padece de una úlcera estomacal o úlcera péptica. El dolor abdominal severo también puede ser un signo de cálculos biliares, pancreatitis o enfermedad hepática; por eso, es importante que el especialista sea quien indique las razones del síntoma.
  • Sentirse inflamado o presentar sensación de pesadez constante: este síntoma, por lo general, se debe a un exceso en la producción de gas, hipersensibilidad al gas, o gas atrapado en el colon. Este síntoma puede indicar que hay enfermedades leves o graves; por eso, es indispensable la valoración de este especialista para conocer las verdaderas causas del padecimiento.
  • Sangre en la heces: la especialista Kerri Glassner menciona que cuando esto sucede es importante consultar con un especialista lo antes posible. “Cada vez que veas sangre en tus heces o tengas sangrado rectal acompañado de cambios en tus hábitos intestinales o en el color, o la consistencia de las heces, es fundamental que veas a un gastroenterólogo”, y advierte que “el sangrado rectal no siempre es una gran preocupación, pero puede ser un signo de una afección médica grave, como el cáncer colorrectal”.

Alimentos con probióticos para la salud intestinal

La Organización de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación, recomienda consumir los siguientes seis alimentos con probióticos:

  • Yogur: proporciona una mejora de la salud digestiva y esto se debe a los probióticos que contiene, ya que son muy útiles para el bienestar del sistema digestivo y por eso mejoran el viaje del bolo alimenticio. También, son muy útiles como protectores de la descomposición.
  • Aceitunas y otros encurtidos: estos alimentos son los menos conocidos, pero lo más importante es que sean fabricados artesanalmente, pues con la producción industrial se pueden incluir sustancias que maten los microorganismos y, por tal razón, pierdan el efecto.
  • Kéfir: es una leche fermentada que tiene una gran cantidad de probióticos que mejoran la flora intestinal y el tránsito intestinal. Además, ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Los probióticos son alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos. | Foto: Getty Images
  • Miso: este alimento asiático contiene muchos probióticos naturales y es una especie de soja fermentada.
  • Quesos de leche sin pasteurizar: los quesos que son preparados con leche cruda son los que naturalmente tienen más probióticos y es fundamental que la leche esté sin pasteurizar para que conserve todas las propiedades.