El acné es una afección común de la piel que provoca espinillas (granos), los cuales se forman cuando los folículos pilosos que están debajo de la piel se tapan. La mayoría aparecen en el rostro, el cuello, la espalda, el pecho y los hombros, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Si bien cualquier persona puede tener acné, es más común en los adolescentes y los adultos jóvenes. No es grave, pero puede dejar cicatrices.

Aunque no se conoce exactamente cuál es la causa del acné, se dice que una de las razones detrás de esta afección son los cambios hormonales, tales como los que ocurren en la adolescencia o el embarazo.

Información del portal Healthline indica que cuando se trata de un tema hormonal normalmente se asocia con cambios durante la pubertad; no obstante, el acné hormonal puede afectar a adultos de cualquier edad. Es especialmente común en las mujeres y hay factores que contribuyen a esto, incluyendo la menstruación y la menopausia.

Las opiniones de los expertos están divididas cuando se trata de acné hormonal. Si bien, por ejemplo, el instituto Mayo Clinic dice que las hormonas generalmente no son un factor en el acné en adultos, según Healthline, los desequilibrios hormonales aportan a este padecimiento con afecciones médicas subyacentes.

Al respecto, el portal Medical News Today asegura que en ocasiones se le llama acné hormonal debido a la forma en que se desarrolla el problema de la piel en respuesta al aumento de andrógenos, como la testosterona.

El incremento de los niveles de andrógenos es posible que desencadene en un proceso de mayor producción de sebo, cambios en la actividad de las células de la piel, inflamación y colonización de los folículos pilosos por una bacteria conocida como Propionibacterium acnes (P. acnes). Al juntarse estos elementos se facilita el desarrollo del acné.

¿Cómo se caracteriza?

Durante la pubertad, el acné hormonal suele aparecer en la zona T. Esta zona incluye la frente, nariz y barbilla. Por su parte, en el adulto normalmente se forma en la parte inferior de la cara; es decir, abajo de las mejillas y alrededor de la mandíbula.

Hay pacientes para quienes esta afección toma la forma de puntos negros, blancos y pequeños granos que llegan a la cabeza o quistes, los cuales se generan debajo de la piel y no salen a la superficie. Estos bultos suelen ser sensibles al tacto.

El acné hormonal, según Healthline, puede ser causado por la afluencia de hormonas de: la menstruación, el síndrome de ovario poliquístico (PCOS, en inglés), la menopausia y niveles altos de andrógenos.

Específicamente, estos cambios hormonales pueden agravar los problemas del acné al aumentar la inflamación general de la piel, la producción de sebo en los poros, las células de la piel obstruidas en los folículos pilosos y la producción de bacterias que lo causan.

Severidad del acné

El acné puede ser leve, moderado o grave. En el primer caso, se presentan principalmente puntos negros y espinillas y, por lo general, no necesita ayuda profesional. Normalmente, en este caso se presentan menos de 20 comedones o 15 lesiones inflamatorias.

El acné moderado involucra lesiones inflamadas y no inflamadas, algunas de las cuales dejan cicatrices. Según Medical News Today, aquí puede haber más de 20 comedones y más de 50 lesiones inflamatorias.

Por último, en el acné grave se presentan lesiones inflamadas generalizadas. Tiene incidencia tanto en la apariencia como en la autoestima, a la vez que la persona corre el riesgo de que deje cicatrices en la piel, las cuales en muchas ocasiones no son fáciles de eliminar.