Al cáncer de estómago también se le conoce como gástrico o estomacal. Es una enfermedad que se origina en las células que revisten este órgano, ubicado del lado izquierdo del abdomen y que participa en la digestión de los alimentos en los seres humanos.
El instituto de investigación Mayo Clinic afirma que esta afección puede desarrollarse en cualquier parte del estómago, pero lo más frecuente es que se manifieste en el área principal.
“Las células cancerosas se pueden propagar a otras partes del cuerpo. Por ejemplo, en ocasiones, las células cancerosas en el estómago pueden desplazarse hacia el hígado y crecer ahí. Cuando las células cancerosas se propagan, se habla de una metástasis. Para los médicos, las células cancerosas en el nuevo sitio lucen justo como las que se originaron en el estómago”, indica la Sociedad Americana contra el Cáncer.
Indica el portal web Cinfasalud que el 90 % de los casos de cáncer de estómago se originan en la mucosa y se denominan adenocarcinomas, pero adicionalmente están los linfomas, los sarcomas, los tumores del estroma gastrointestinal (GIST) y los melanomas.
Aunque la Clínica Mayo no argumenta cuál es la causa exacta del desarrollo de esta enfermedad, sí menciona que existen factores de riesgo que pueden incidir en él, porque este cáncer comienza cuando una célula del órgano cambia en su ADN y su crecimiento lo hace de manera irregular. Asimismo, al acumularse y estar dañadas forman un tumor destruyendo el tejido sano.
Una persona que no incluya en su dieta frecuente alimentos como las frutas y verduras, que sea obeso, que tenga un alto consumo de tabaco y de alcohol, y que, además, dé un diagnóstico de reflujo gastroesofágico, puede ser vulnerable. Por lo que unos buenos hábitos son más que necesarios para prevenir esta enfermedad.
Las personas que ya tienen el cáncer de estómago experimentan síntomas. Aunque, en muchas ocasiones, no manifiestan ninguno y se vuelve silencioso. Por este motivo es importante aclarar que este tipo de cáncer no se detecta en una etapa inicial porque no causa signos específicos, pues cuando comienzan a presenciarse es porque son ambiguos. Tenga en cuenta que los síntomas que se mencionarán a continuación pueden ser causados también por otras afecciones, como un virus o una úlcera estomacal. Los síntomas son:
- Indigestión y acidez estomacal.
- Dolor o molestias frecuentes en el abdomen.
- Náuseas y vómitos, especialmente cuando un individuo vomita los alimentos sólidos poco después de haberlos consumido.
- Diarrea o estreñimiento.
- Hinchazón del estómago después de las comidas.
- Pérdida del apetito.
- Sensación de que los alimentos se atoran en la garganta al comer.
Cuando el tiempo pasa y el cáncer de estómago va avanzando, los síntomas comienzan a ser mucho más notorios y graves, entre ellos están:
- Debilidad y fatiga.
- Vómitos de sangre o sangre en la materia fecal.
- Pérdida de peso sin razón aparente.
¿Qué hacer para prevenir el cáncer de estómago?
Los expertos de Cinfasalud mencionan en su portal web que existen algunas estrategias encaminadas a reducir el riesgo de desarrollar un cáncer gástrico. Aliste papel y lápiz y tome nota de las recomendaciones del medio de los especialistas.
- Aumentar el consumo de vegetales y frutas frescas.
- Reducir el consumo de salsas y productos ahumados.
- Conservar adecuadamente los alimentos.
- No fumar.
- Tratar la infección por la bacteria Helicobacter pylori.
- Mantener un peso corporal normal, evitando la obesidad y practicando ejercicio físico regular.
- En personas con enfermedades predisponentes y síndromes hereditarios, el médico solicitará las pruebas e indicará los tratamientos que considere indicados para cada caso, teniendo en cuenta sus antecedentes familiares y personales.
- Reducir la sal: aunque el sodio puede ser saludable para el organismo, su alto consumo no lo es.