La tos es la manera que tiene el cuerpo de responder cuando algo irrita la garganta o las vías respiratorias. Un agente irritante estimula los nervios que envían un mensaje al cerebro. Luego, el cerebro les indica a los músculos del pecho y el abdomen que liberen el aire de los pulmones para expulsar al agente irritante, de acuerdo Mayo Clinic.

Una tos ocasional es normal y saludable. Sin embargo, una tos persistente durante varias semanas o acompañada de expectoración con mucosidad descolorida o con sangre puede indicar una enfermedad que necesita atención médica.

A veces, la tos puede ser muy fuerte. Una tos prolongada y vigorosa puede irritar los pulmones y causar aún más tos. Produce cansancio y puede causar problemas para dormir, mareos o desmayos, dolores de cabeza, incontinencia urinaria, vómitos y hasta costillas rotas.

Asimismo, la tos puede ser aguda o crónica: la tos aguda generalmente comienza de manera repentina y por lo general, desaparece después tres semanas, la tos subaguda dura de 3 a 8 semanas y la tos crónica dura más de 8 semanas.

Además, la entidad sin ánimo de lucro resumió que las causas comunes (agudas):

  • Resfriado común.
  • Influenza (gripe).
  • Inhalación de un irritante (como humo, polvo, sustancias químicas o un cuerpo extraño).
  • Neumonía.
  • Tos ferina.

Causas comunes:

  • Alergias.
  • Bronquitis.
  • Enfermedad por reflujo gastroesofágico.
  • Goteo retronasal.

Otros

  • Sinusitis aguda (infección nasal y de los senos paranasales).
  • Bronquiectasia (una afección pulmonar crónica en la que el ensanchamiento anormal de los bronquios inhibe la eliminación de la mucosidad).
  • Bronchiolitis (especialmente en los niños pequeños).
  • Ahogamiento: primeros auxilios (especialmente en los niños).
  • Enfermedad del coronavirus 2019 (covid-19).
  • Difteria (especialmente en los niños pequeños).
  • Fibrosis quística.
  • Enfisema.
  • Insuficiencia cardíaca.
  • Laringitis.
  • Cáncer de pulmón.
  • Medicamentos llamados “inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (ECA)”.
  • Enfermedades neuromusculares que debilitan la coordinación de las vías respiratorias superiores y los músculos de la deglución.
  • Embolia pulmonar (coágulo de sangre en una arteria del pulmón).
  • virus respiratorio sincitial (VSR) (especialmente en los niños pequeños).
  • Sarcoidosis (grupos de células inflamatorias en el cuerpo).
  • Tuberculosis.

En consecuencia, la persona debe asistir al médico para que le realicen exámenes si tiene tos con flema espesa, amarilla verdosa, silbido al respirar, fiebre, dificultad para respirar, desmayos, hinchazón de los tobillos o pérdida de peso, ya que esto podría ser peligroso.

Además, si hay ahogo o vómitos, dificultad para respirar o tragar, tos con flema con sangre o coloración rosa o dolor en el pecho.

Por su parte, la entidad sin ánimo de lucro reveló que para aliviar la tos, la persona puede probar estas sugerencias:

  • Chupe pastillas para la tos o caramelos duros. Estos pueden aliviar la tos seca y suavizar la garganta irritada. Pero no se los de a niños menores de 6 años, porque existe riesgo de atragantamiento.
  • Humedezca el aire. Use un humidificador de vaporización fría o tome una ducha con mucho vapor.
  • Beba líquidos. Los líquidos ayudan a diluir la mucosidad en la garganta. Los líquidos calientes, como los caldos o el zumo de limón, pueden suavizar la garganta.
  • Evita el humo de tabaco. Fumar o respirar humo de segunda mano puede empeorar la tos.

De todos modos, antes de consumir algún medicamento o iniciar un tratamiento lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones son tratamientos recomendados por Mayo Clinic, pero no son los indicados para todas las personas.