El funcionamiento óptimo del organismo depende en gran medida a la cantidad de vitaminas y minerales presentes. Con respecto a las primeras, estas cumplen un rol esencial para el desarrollo celular y del sistema inmunológico.
Partiendo de la información de Medline Plus, se sabe que las vitaminas corresponden a un grupo de sustancias vitales para el cuerpo. En total, hay 13 familias vitamínicas, las cuales responden ante diferentes responsabilidades y en conjunto se les puede sacar mayor provecho a los beneficios que proporcionan.
Adicionalmente, estos grupos están divididos en dos categorías: por un lado están las liposolubles, los cuales hacen referencia a aquellas vitaminas que se almacenan en el hígado, tejido graso y músculos del cuerpo. En cuestión, las familias que hacen parte de esta categoría son las A, D, E y K.
En cambio, las vitaminas hidrosolubles no se almacenan en el cuerpo. El resto de nueve grupos corresponden a esta categoría y deben consumirse con regularidad para evitar carencias o deficiencias en el cuerpo. Los excedentes de estas vitaminas, después de la absorción del organismo, se eliminan por la orina.
Teniendo en cuenta esta información, no quedan dudas que el consumo constante de vitaminas es esencial para gozar de bienestar. No obstante y al igual que gran parte de los productos alimenticios, las pastillas de complemento vitamínico tienen fecha de caducidad. ¿Es posible tomarlas después de pasado ese tiempo?
La respuesta está en el informe ‘La pandemia dispara el gasto en vitaminas, minerales y suplementos alimenticios’, realizado por expertos de Food Retail & Shoppers. Como punto de partida, se tiene en cuenta que desde la pandemia, la compra de alimentos y suplementos vitamínicos y de minerales aumentaron considerablemente.
Ha sido tal el impacto que en Estados Unidos la compra de estos productos ha alcanzado los 9 mil millones de dólares en ventas, las cuales se ven representados en que el 86% de la población norteamericana consume vitaminas diariamente en diferentes dosis.
Los consumidores le han apostado a ello por los beneficios que ofrecen las vitaminas, tales como mejorar la salud a nivel general, fortalecer el sistema inmune, aumentar el aporte energético, perder peso y contribuir a la digestión. Empero, un punto de especial atención radicó en el consumo de estos minerales mediante pastillas caducadas.
Como tal, la población que hizo parte el estudio planteó la duda frente a las vitaminas caducadas; al no saber si todavía son consumibles o no. Sobre ello, los expertos señalaron que estos productos deben desecharse adecuadamente, tomando en cuenta que deben estar alejados del alcance de menores de edad.
Adicionalmente, señalaron que no deben eliminadas en el inodoro, por el hecho que puede contaminar el agua potable. Lo mejor para estos casos es acudir a una farmacia especializada y darles el material caducado para que ellos se encarguen de su desecho a partir de la experticia.
El Centro Médico Quirúrgico de Enfermedades Digestivas (CMED) indica que, si bien la ingesta de vitaminas vencidas no es un peligro de alarma, la recomendación es no tomarlos, por el hecho que la eficiencia del nutriente se habrá perdido hace rato.
Pasada la fecha de caducidad, las vitaminas pierden efectividad y cambiarán de color. En cambio, la recomendación es estar pendiente de consumirlas en los tiempos adecuados, conservarlas en lugares secos y alejados de la luz (por ejemplo, una nevera). Estas recomendaciones ayudarán a mantenerlas en óptimas condiciones y así impedir que se dañen.