El espolón calcáneo es una afección en la que el hueso del talón crece en forma triangular o de lanza. De acuerdo con Podoactiva, “se produce cuando la fascia plantar (tejido elástico que une el talón con la zona de debajo de los dedos del pie) está sometida a excesiva tracción y sobrecarga generando unas microrroturas en su inserción. Esta parte se calcifica formándose esa especie de “hueso” que provoca un dolor agudo en el talón, como si fuesen pinchazos”.

El síntoma más común es dolor en la parte interna del talón. Asimismo, también se pueden presentar pinchazos en cualquier área de la planta del pie. El espolón calcáneo en sí no es el que causa dolor, sino la irritación de los tejidos alrededor.

En caso de presentar estos signos es importante consultar a un médico para recibir la asesoría adecuada e iniciar un tratamiento oportunamente. Sin embargo, también existen algunas opciones naturales que pueden funcionar como un complemento para el espolón calcáneo.

Tua Saúde, portal especializado en salud y cuidado personal, explica cómo preparar algunos remedios caseros que pueden ayudar a tratar naturalmente esta afección.

Remedio #1

Ingredientes

  • 2 litros de alcohol.
  • 1 cucharadita de mirra.
  • 1 cucharadita de angélica.
  • 1 cucharadita de azafrán.
  • 1 cucharadita de ruibarbo.
  • 1 cucharadita de sábila.
  • 1 piedra de alcanfor.

Procedimiento

  1. En una taza mezclar muy bien todos los ingredientes.
  1. Agregar a un recipiente de vidrio.
  1. Dejar reposar por 20 días y revolver diariamente.
  1. Luego de este tiempo, mojar un paño limpio y aplicar en el pie.
  1. Vendar el pie y dejarlo actuar toda la noche.

Remedio #2

La sal de Epsom, también conocida como sulfato de magnesio, es fácil de adquirir y funciona como un remedio casero para aliviar el dolor en los pies.

Ingredientes

  • 2 cucharadas de sal de Epsom.
  • 1 balde con agua.

Procedimiento

  1. Calentar agua y agregar a un balde.
  1. Añadir la sal y revolver.
  1. Dejar los pies en remojo por 20 minutos o esperar a que el agua se enfríe.

Remedio #3

Ingredientes

  • 1 Semilla de aguacate.
  • 500 ml de alcohol.
  • 4 piedras de alcanfor.

Procedimiento

  1. Rallar la semilla de aguacate.
  1. Agregarla a un recipiente.
  1. Añadir el alcohol y el alcanfor.
  1. Dejar reposar por 20 días.
  1. Revolver diariamente la solución.
  1. Luego de este tiempo, tomar un paño y remojarlo en la solución.
  1. Aplicar en la zona afectada.
  1. Dejarlo actuar toda la noche.

Remedio #4

Ingredientes

  • 10 hojas de espinaca.
  • Gasa.

Procedimiento

  1. Cortar la espinaca y triturar muy bien.
  1. Aplicarla en la zona afectada.
  1. Vendar con una gasa o paño.
  1. Dejar actuar por 20 minutos.
  1. Enjuagar con agua tibia.

Otras alternativas

Plantillas

La plantilla de silicona es una herramienta que puede ayudar a disminuir la presión que ejerce el peso del cuerpo sobre la región afectada del pie. “Lo ideal es que se utilice una plantilla que contenga un “agujero” exactamente en el lugar donde se ubica el espolón, debido a que de esta forma la planta del pie queda bien apoyada y la región dolorida no entra en contacto ni con la plantilla, ni con el zapato”, apunta Tua Saúde.

Fisioterapia

La fisioterapia para esta afección puede incluir electroterapia y hielo para disminuir la inflamación de los tejidos alrededor del espolón. Tua Saúde menciona algunos tratamientos:

  • “Ultrasonido con gel neutro o con propiedad antiinflamatoria.
  • Láser para ayudar a desinflamar y cicatrizar los tejidos inflamados.
  • Masaje transverso profundo que pueden causar alguna incomodidad, pero ayudan a aliviar el dolor.
  • Uso de una férula nocturna en el pie, que inmoviliza el tobillo y estira la planta del pie.