Con la época de diciembre la piel puede verse afectada negativamente. Algunas personas realizan bronceados para lucir un tono de piel diferente o hay quienes realizar excursiones donde la sobreexposición solar es protagonista.

Asimismo, el exceso de maquillaje y de comidas pueden afectar la salud cutánea. Es importante que en caso de observar cambios en la textura de la piel, aparición de acné u otras afecciones se consulte a un dermatólogo para recibir la atención profesional adecuada.

Por su parte, el portal web de la revista Vogue señala algunos consejos para tener una piel saludable después de la época de diciembre.

1. Limpieza profunda

Es importante dedicar un tiempo exclusivo luego de todo el trajín y los compromisos realizados en la época navideña para cuidar la piel. Lo recomendable es aplicar bálsamos antes del maquillaje y aceites limpiadores para limpiar el cutis.

2. Desintoxicación

Luego de todos los excesos de Navidad y año nuevo, Vogue recomienda una limpieza exhaustiva para desintoxicar la piel. Para esto se puede utilizar una mascarilla a base de lodo. Puede adquirirse en un centro de belleza o farmacia.

3. Hacer limpieza de maquillaje

Este procedimiento consiste en preguntarse cuáles son los productos de maquillaje que realmente se utilizan. Para ello se puede observar también cuáles son aquellos que no se han utilizado ya hace un tiempo. Esto, para realizarse un look más natural y que la piel descanse del uso de este tipo de productos.

“Para simplificar, los básicos para cualquier look –mientras más natural, mejor– son: un hidratante con color o una base de maquillaje, corrector y máscara de pestañas”, señala Vogue.

4. Utilizar productos multifunciones

Al momento de aplicar productos para la piel los expertos de Vogue recomiendan utilizar tratamientos que brinden cobertura para las necesidades durante el día. Aquellos que tengan diferentes beneficios para la salud cutánea: suavizan e hidratan la piel, por ejemplo.

¿Por qué es importante cuidar la piel del sol?

La sobreexposición solar puede producir quemaduras y acelerar la aparición de arrugas y otras afecciones cutáneas relacionadas con el envejecimiento. La exposición a los rayos UV, UVA y UVB disminuye la elasticidad de la piel, afectando su apariencia.

Además de los daños estéticos que puede sufrir la piel, este órgano puede verse gravemente afectado y desarrollar enfermedades crónicas como cáncer.

“Demasiada radiación UV proveniente del sol o de camas solares puede dañar el material genético (ADN) en las células de la piel. Si con el tiempo se acumula suficiente daño en el ADN, esto puede llevar a un crecimiento descontrolado de células, lo que puede provocar cáncer de piel”, apuntan los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, recomienda realizar chequeos periódicos de la piel para detectar a tiempo el desarrollo de tumores sospechosos o cambios en la piel.

De acuerdo con Medline Plus, las células cancerígenas pueden formarse en la cabeza, el cuello, la cara, las manos y los brazos. Aunque todos pueden padecer cáncer de piel, es más común en personas que tienen las siguientes caracterísicas:s

  • Están expuestas mucho tiempo al sol o han sufrido quemaduras por el sol.
  • Tienen cabello, piel y ojos claros.
  • Tienen un familiar que ha tenido cáncer de piel.
  • Tienen más de 50 años.

Es importante que desde la infancia los padres o cuidadores enseñen a los niños a tener medidas para protegerse del sol como usar gorras y sobreros, transitar por la sombra, aplicar fotoprotector (bloqueador solar). En el caso de los adolescentes es fundamental enseñarles que eviten el uso de cámaras de bronceo y otro tipo de prácticas relacionadas con la sobreexposición solar.