Los triglicéridos son un tipo de grasa que, por lo general, proviene de alimentos, especialmente de la mantequilla, de los aceites y otras grasas que se ingieren. También se encuentra en las calorías adicionales que no se queman; estas son aquellas que las personas consumen, pero que el cuerpo no necesita de inmediato.
El exceso de triglicéridos en el organismo puede ocasionar problemas de salud como enfermedades cardíacas, accidentes cardiovasculares, hipertensión e hiperglucemia, así lo explicó el portal web de salud y medicina MedlinePlus.
Según Mayo Clinic, para evitar exceder el límite de triglicéridos es necesario llevar un estilo de vida saludable. Entre los hábitos recomendados están hacer ejercicio regularmente, evitar el consumo de carbohidratos refinados, moderar la ingesta de alcohol y elegir más grasas saludables a la hora de comer.
La Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) sugiere que las personas mayores de 20 años se realicen pruebas cada cuatro a seis años. Generalmente, cuando los individuos son diagnosticados con triglicéridos altos, es probable que quieran una solución rápida y efectiva para su tratamiento, por eso, es fundamental la actividad física, una buena alimentación y seguir las recomendaciones médicas al pie de la letra.
El ajo es uno de esos alimentos indispensables de la cocina. Muchos lo utilizan para sazonar todo lo que cocinan, porque todos necesitan de ese plus que el bulbo le puede dar a la comida y particularmente a las salsas. Es una hierba rica en compuestos sulfurados y la sustancia que le da su olor característico es la alicina, que también es responsable por alguno de sus múltiples beneficios a la salud como controlar los triglicéridos.
Según la Fundación del Corazón, la hipertrigliceridemia, conocida comúnmente como tener los niveles de triglicéridos altos, consiste en una elevación anormal del nivel de triglicéridos, que es el principal tipo de grasa que se encuentra en la sangre. Por eso, es recomendable mantener sus niveles en rangos normales (por debajo de los 150 mg/dl), ya que los niveles altos se asocian a un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y pancreatitis.
Por otro lado, el portal Mayo Clinic afirma que los triglicéridos altos a menudo son un signo de otras afecciones que aumentan el riesgo de sufrir enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular, incluyendo la obesidad y el síndrome metabólico, además, un grupo de condiciones, entre ellas hipertensión arterial, triglicéridos altos, hiperglucemia y niveles anormales de colesterol.
Agua de ajo para bajar triglicéridos
Además de los beneficios mencionados, el ajo ayuda bastante a la función digestiva y a controlar el colesterol y triglicéridos para que las personas no tengan altibajos molestos, con el factor de que si tiene los triglicéridos altos, aumente el riesgo de padecer un infarto. Por lo tanto, este condimento ayuda a que se puedan reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y los triglicéridos en la sangre.
Adicionalmente, el ajo es un alimento que disminuye la presión arterial alta, debido a que ejerce un efecto hipotensor, con lo que favorece la circulación de la sangre por causar un efecto vasodilatador. Igualmente, evita que se formen trombos, ya que inhibe la agregación plaquetaria y brinda una mejor calidad de vida más saludable, que la de la mayoría de la gente que no lo consume.
Por esta razón, para las personas que tienen los triglicéridos altos o que conocen a alguien así, la recomendación es una bebida de ajo. Se trata de una receta de agua con ajo, que según el portal Gastro Lab, si se toma por dos semanas o un mes se verán los resultados de mejoría de inmediato y se verán reflejados en los próximos estudios médicos de la persona que lo consuma. Aquí su preparación:
Ingredientes
- Un diente de ajo machacado.
- 100 ml de agua.
Preparación
- Colocar un diente de ajo machacado en 100 ml de agua.
- Dejar reposar la mezcla durante toda la noche.
- Finalmente, consumirla al día siguiente.