Los profesionales de la salud han recomendado desde hace muchos años mantener un estilo de vida saludable para que el organismo permanezca fuerte y esté preparado para prevenir y combatir diferentes tipos de enfermedades. Entre los hábitos positivos que debe prevalecer en cada persona resaltan la alimentación saludable, la práctica de ejercicio constante y el dormir bien.

Si esto no se lleva a cabo y un individuo abusa del consumo de alimentos o productos cargados de grasas dañinas, azúcar y sodio, y además de eso práctica el sedentarismo y no duerme bien, se arriesga a que una afección grave lo ataque.

Por ejemplo, una de las enfermedades que más suele afectar a millones de personas en Colombia y en diferentes partes del mundo, por mantener un estilo de vida poco saludable, es la diabetes, la cual es un trastorno de tipo crónico y metabólico que se da por tener los niveles altos de la glucosa en la sangre.

“La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la sangre están muy altos. La glucosa proviene de los alimentos que consume. La insulina es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles energía. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, la más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre”, explica Medline Plus, Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.

La alimentación es uno de los aspectos más determinantes para controlar la diabetes. | Foto: Fertnig/Getty Images

“Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios. Puede dañar los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional”, agrega la entidad.

Cabe mencionar que los principales síntomas de esta enfermedad son el aumento de la sed y la micción frecuente, el incremento del apetito, heridas que no sanan, infecciones que van y vienen, problemas de visión, pérdida de peso sin razón alguna, cansancio o debilidad, entre otros más.

Si una enfermedad crónica y metabólica como la diabetes no se trata de buena manera, puede llegar a ser mortal. Por eso, es de vital importancia que las personas que sufren de este trastorno sigan las indicaciones de los profesionales de la salud.

Como la gran mayoría de enfermedades, la diabetes se puede prevenir. Precisamente, hay un hábito muy especial que se debe realizar con regularidad para evitar esta afección. Se trata de la práctica de ejercicio o actividad física, así lo determinó un estudio. Incluso, el riesgo del trastorno se reduce hasta un 70 %.

Hacer ejercicio evita la diabetes. | Foto: Abel Mitjà Varela | Getty Images

En una investigación, que analizó la práctica de ejercicio de un grupo de personas, encontró que “aquellos que hacían más de una hora diaria de actividad física de intensidad moderada a vigorosa tenían un riesgo 74 % menor de desarrollar diabetes de tipo 2. Este resultado se mantuvo incluso teniendo en cuenta otros factores, como el riesgo genético”, reseña la plataforma digital Urgente 24.

“La actividad física de intensidad moderada es, por ejemplo, caminar a paso ligero o hacer jardinería. Mientras, la actividad física de intensidad vigorosa incluye correr, bailar aeróbicamente o ir en bicicleta cuesta arriba”, agrega el sitio web.

Práctica de ejercicio, esencial para la salud. | Foto: Getty Images

Es muy importante, al momento de realizar ejercicio, hacerlo acompañado por un especialista en el tema. En general, la actividad física es un hábito que ayuda a mantener buenas condiciones de salud.