De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el infarto de miocardio es la primera causa de muerte en el mundo. Esta representa el 16 % del total de defunciones a nivel global.
Existen algunos consejos que al ponerlos en práctica pueden reducir la posibilidad de que la persona sufra de este tipo de ataques. Estos son:
Reducir el consumo de sal en la comidas
Posiblemente esta es una de las recomendaciones más populares en cuanto a salud cardiovascular se refiere. El problema es que en muchas ocasiones las personas no son conscientes de la cantidad de sal que consumen porque a esta se la considera “invisible”.
Pero es importante tener en cuenta que esta se encuentra dentro de los alimentos procesados y podría significar el 70 % o 75% de la sal que una persona consume de manera regular.
Prevenir la diabetes también ayuda a prevenir un infarto
El 80 % de las personas que padecen diabetes tipo 2, aumentan sus posibilidades de padecer algún accidente cardiovascular.
De acuerdo con la Federación Española del Corazón prevenir el aumento de azúcar en la sangre también representa mayor cuidado del corazón. Para evitar padecer de alguna o de las dos patologías, es recomendable seguir las siguientes recomendaciones:
La bollería industrial es enemigo acérrimo del corazón
Dentro de este grupo de alimentos ultraprocesados entran también las galletas, los snacks y los cereales azucarados, etc. Estos productos contienen grasas trans, es decir, aquellas que se obtienen cuando convierten aceites líquidos en grasas sólidas, como manteca o margarina.
Las bebidas energéticas pueden alterar la salud cardiovascular
Estas bebidas traen consigo muchos factores negativos. En primer lugar, suelen contener altos índices de azúcar y aditivos, por lo tanto también se relacionan con problemas de obesidad o de diabetes, algo que se debe prevenir.
Por otra parte, muchas contienen también cafeína, la cual aumenta la frecuencia cardiaca y puede elevar la presión arterial si se consume de forma descontrolada.
Alimentos para cuidar nuestra salud cardiovascular
Es importante destacar que una alimentación saludable y equilibrada es clave para cuidar la salud, pero es cierto que hay ciertos alimentos que, gracias a sus propiedades, además de ser saludables, ayudan a prevenir un posible infarto, algunos de ellos son:
- Las legumbres: Por desgracia las legumbres son un tipo de alimento que ha perdido mucha popularidad en los últimos años, se considera más bien un complemento en comidas y no un superalimento con propiedades muy beneficiosas para la salud. De hecho, por todos sus beneficios, los expertos recomiendan consumir legumbre entre tres y cuatro veces a la semana. Estas tienen la capacidad de reducir significativamente los niveles de colesterol LDL, por lo que a su vez, reducen el riesgo cardiovascular.
- Frutas y verduras: Tanto frutas como verduras son un básico de cualquier alimentación saludable. Gracias a su aporte de agua al cuerpo, sus vitaminas, minerales, fibra y en muchos casos los antioxidantes que aportan se convierten en claves para la prevención y el cuidado del corazón. Las fresas, los arándanos o la papaya por ejemplo, son algunas frutas muy recomendables para evitar infartos.
- Pescado azul y carne blanca: Al igual que ocurre con los lácteos, los pescados y las carnes son también alimentos muy beneficiosos para la salud, pero es preferible dentro de estos seleccionar los más “limpios” y bajos en grasas.
- Chocolate, té verde y frutos secos: El cacao, es rico en fibra soluble y flavonoles, un tipo de flavonoide que cumple un efecto cardioprotector y cuenta además con propiedades antioxidantes, que reducen la presión arterial. Sin embargo, cuanto más puro sea el chocolate, mejor será para la salud.
En definitiva la dieta mediterránea tradicional, aplicando algunos de estos consejos, se puede convertir en la mejor herramienta para cuidar el y prevenir un fallo cardíaco.