El cabello sufre más daños cuando está expuesto al sol, cuando se viaja y tiene contacto con la sal del agua del mar y con el cloro de la piscina. El pelo está expuesto a múltiples agresiones externas que pueden deteriorarlo, haciendo que luzca sin vida, más seco, débil, quebradizo y apagado, pudiendo en ocasiones producirse caída del mismo.
Por eso, el doctor Carlos Portinha brinda una serie de recomendaciones, que permitirán mejorar la salud del cabello.
Hidratación
Las largas exposiciones al sol, al cloro de las piscinas o a la sal del mar, hacen que el pelo se vea más seco y sin vitalidad. Para reducir al máximo estos efectos, el Dr. Portinha afirma que “hidratar el cabello durante el verano es un aspecto fundamental, y es necesario utilizar productos que mejoren la estructura del cabello y que ayuden a devolver el brillo habitual a nuestro pelo”.
Asimismo, para seguir reduciendo estos efectos, además de una adecuada hidratación “es necesario el uso de protectores solares con regularidad”.
Lavar y secar el cuero cabelludo
Otro de los aspectos clave para proteger al cabello, es tener un correcto lavado antes y después de la exposición del pelo al sol, cloro o sal; como de la forma de secado al terminar.
Según el doctor Carlos Portinha es necesario mojar en agua el pelo antes de entrar en la piscina para que el cabello absorba menos agua de la misma y, por tanto, quede menos expuesto a sustancias, como el cloro y agentes antialgas. Además, para después del baño recomienda “lavar el pelo con agua tibia o fresca, ya que al emplear agua caliente el cabello tiende a deshidratarse y puede llegar a ser perjudicial para las proteínas capilares”.
Alimentación
Una correcta elección de los alimentos es siempre un tratamiento excelente para el cabello. “Es importante no olvidarse de alimentos como las sardinas, la caballa o las nueces, ricos en ácidos grasos omega-3 y omega 6; además, la vitamina C mejora la circulación en el cuero cabelludo. Otros alimentos como la zanahoria, la auyama, el durazno tienen carotenos que son cruciales para la prevención de la caspa y la caída. Y, por supuesto, beber mucha agua, es imprescindible para hidratar la estructura interna del cabello” asegura el especialista.
Usar sombreros y gorras para cuidar el cabello
El uso de sombreros y gorras también trae beneficios para la salud del cabello, ya que ayuda a proteger el cabello de los rayos del sol; sin embargo, no hay que abusar de su utilización porque el cuero cabelludo también necesita una correcta ventilación y puede llegar a ser perjudicial.
Evitar el uso de tintes
Los tintes, en general, dañan el cabello, por lo que recurrir a ellos en temporada de verano no es la decisión más acertada, teniendo en cuenta lo expuesto que está el cabello en esta época. Tal y como indica el doctor, “después utilizar un tinte, el cabello está en su punto más vulnerable”. Por eso es recomendable evitar la piscina durante al menos una semana para que los compuestos químicos se asienten y así prevenir cualquier reacción química con el cloro y otros productos que pueden hacer que el pelo se tiña de verde, una decoloración prematura, deshidratación y rotura, entre otras consecuencias.
Con información de Europa Press.