Los lentes de contacto son discos delgados y transparentes de plástico que se usan en el ojo para mejorar la visión. Estos elementos flotan sobre la película lagrimal que cubre la córnea; al igual que las gafas recetadas, los lentes de contacto corrigen los problemas de visión causados por errores refractivos. Un error refractivo sucede cuando el ojo no refracta (dobla o enfoca) la luz apropiadamente dentro del ojo, produciendo una imagen borrosa, explicó la Academia Americana de Oftalmología.
Los lentes de contacto pueden mejorar la visión de las personas que tienen:
- Miopía.
- Astigmatismo (visión distorsionada).
- Presbicia (cambios en la visión de cerca que normalmente suceden con la edad).
Tipos de lentes de contacto
Lentes de contacto rígidos: este es el más común de los lentes de contacto. Están hechos de plástico combinado con otros materiales y conservan su forma firmemente, pero permiten el flujo de oxígeno entre el lente y el ojo. Estos lentes ayudan a personas con astigmatismo y con una condición llamada queratocono. Esto se debe a que proveen una visión más definida que los lentes blandos cuando la córnea tiene una curva irregular.
Lentes de contacto blandos: la mayoría de las personas prefiere usar estos lentes, pues suelen ser más cómodos y existen muchas opciones. Estos son algunos tipos de lentes blandos.
- Lentes de uso diario: se pueden usar durante el día y deben ser retirados en la noche. La mayoría es desechable, lo que significa que se usa un par por día. Otros lentes de contacto son de mayor duración y algunos se pueden reemplazar una vez a la semana, cada dos semanas, cada mes o cada dos meses.
- Lentes de contacto de uso prolongado: este tipo de lentes se puede usar mientras se duerme, pero debe ser retirado al menos una vez a la semana para limpiarlo.
- Lentes de contacto tóricos: pueden corregir la visión de las personas con astigmatismo, pero no tan bien como lo hacen los lentes de contacto rígidos. Los tóricos pueden usarse diariamente o de manera prolongada.
- Lentes de contacto de color: los lentes de contacto para corregir la visión pueden ser de color. Pueden ser de uso desechable, prolongado o lentes tóricos.
- Lentes de contacto decorativos: estos lentes cambian la apariencia del ojo, pero no corrigen la visión. También son utilizados para cubrir deformidades congénitas o causadas por lesiones. A pesar de que no corrigen la visión, es necesario tener una receta para obtener lentes decorativos.
El portal web Cooper Vision brinda los pasos para colocarse los lentes de contacto sin morir en el intento.
- Lavarse las manos: la finalidad de este paso es evitar contaminar los lentes con gérmenes, restos de suciedad o maquillaje, ya que esto podría irritar los ojos o causar algún tipo de infección. Se recomienda lavar bien las manos y secarlas con una toalla de papel para evitar que queden residuos en las manos que luego pueden pasar a los lentes.
- Empezar siempre por el mismo ojo: cada lente tiene una fórmula especial para cada ojo, lo que hace que no sean intercambiables. Los lentes de contacto tienen el mismo aspecto una vez que se sacan del estuche; por eso se recomienda empezar por colocarse el del ojo derecho si se es diestro, y si se es zurdo empezar por el izquierdo.
- Sacar el lente del estuche con cuidado: el lente se debe coger con el dedo índice, para luego ponerlo sobre la palma de la mano. Luego se debe aplicar sobre el lente dos gotas de solución exclusiva para este producto y se debe limpiar con ayuda del dedo índice, haciendo movimientos circulares. Se debe repetir el proceso sobre la otra parte del lente, para eso se debe voltear y luego presionarlo de manera suave para que sea posible limpiarlo por la parte trasera. Para finalizar, se debe buscar el derecho del lente. Para saber esto, la parte del lente debe estar curvada hacia arriba.
- Sujetar el párpado e insertar el lente de contacto: luego de limpiar el lente se debe poner sobre el dedo índice y con la mano que está libre se debe sujetar el párpado hacia arriba e insertar el lente. Algunas personas prefieren desviar la mirada cuando el lente entra en el ojo. Puede hacerse si se desea o también se puede mirar directamente al lente.