La salud ósea depende de una buena alimentación saludable y buenos hábitos de vida, pues los huesos que dan soporte y permiten el movimiento del cuerpo, requieren de nutrientes y actividad física para fortalecerlos y mantenerlos con vida. Como tal, los huesos se encargan de proteger distintos órganos de lesiones, según indica el Instituto Nacional de Osteoporosis y Enfermedades Óseas Relacionadas que hace parte de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).
De este modo, los especialistas en salud recomiendan cuidar los huesos desde temprana edad, pues de lo contrario, es probable que se aumente el riesgo de afecciones como la osteoporosis, una enfermedad que adelgaza y debilita los huesos, especialmente los de la cadera, espina vertebral y muñeca.
Una forma efectiva de proteger los huesos es por medio del consumo de alimentos ricos en calcio como el salmón, un pescado con altos niveles de ácidos grasos omega-3 y antioxidantes que ayudan a proteger contra la degeneración macular relacionada con la edad. Esta proteína además es una buena fuente de vitamina A, que es importante para mantener la salud de la retina, y al ser rico en antioxidantes como la vitamina E, proteger los ojos del daño causado por los radicales libres.
Del mismo modo, el portal web Wibmedy explica que las propiedades antiinflamatorias de los omega-3 pueden ayudar también a reducir los síntomas de la artritis reumatoide, una enfermedad muy común en los adultos mayores. Específicamente el salmón es que es una buena fuente de vitamina D, permite reducción del riesgo de artritis reumatoide y mejorar los síntomas en personas que padecen esta afección degenerativa. Por otra parte, cabe mencionar que este alimento, al ser rico en proteínas, mejora en general la salud de las articulaciones al proporcionarle al cuerpo elementos esenciales para la reparación y el crecimiento.
En cuando a la pérdida de peso, el salmón también es un superalimento que beneficia el peso corporal gracias a su contenido de yodo, magnesio, fósforo, selenio, hierro y calcio, que a su vez ayuda al buen funcionamiento de la tiroides y el intestino.
Otros beneficios del consumo del salmón
- Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares: su contenido de ácidos grasos omega-3, ayudan a disminuir la presión arterial y reducen la inflamación de los diferentes órganos del sistema cardiovascular. Asimismo, el salmón, al ser rico en proteínas, ayuda a bajar la presión arterial y mejorar los niveles de colesterol. Por otra parte, el salmón también ayuda a prevenir la formación de coágulos, ya que aumenta la circulación de la sangre.
- Reduce el riesgo de cáncer: varios de los nutrientes que tiene el salmón tienen efectos antiinflamatorios y antioxidantes que pueden ayudar a proteger contra el cáncer. También, el portal en mención detalla que su contenido de proteínas, permite prevenir el cáncer al proporcionar al cuerpo los componentes básicos necesarios para la reparación y el crecimiento celular.
- Ayuda a combatir la depresión y la ansiedad: la vitamina D y el selenio que contiene el salmón ayudan a reducir los síntomas de depresión y ansiedad. Además, sus proteínas mejoran el estado de ánimo al proporcionarle al cuerpo componentes esenciales para los neurotransmisores que regulan el estado de ánimo y las emociones.
- Reduce el riesgo de la enfermedad de Alzheimer: varios estudios detallan que los alimentos ricos en omega-3 ayudan a proteger contra el deterioro cognitivo y pueden reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. “El salmón es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, especialmente DHA (ácido docosahexaenoico), que es importante para la salud del cerebro. Estos ácidos grasos ayudan a reducir la inflamación en el cerebro, que es un factor de riesgo importante para la enfermedad de Alzheimer”, asegura Wibmedy.