El cuero cabelludo es la piel que cubre la parte superior de la cabeza, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Además, el cuero cabelludo es el encargado de darle vida, fortalecer y aportarle nutrientes al cabello para que este luzca saludable y brillante.
Así las cosas, tanto para las mujeres como para los hombres, lucir un cabello saludable es esencial y por ello la revista Glamour de México reveló que el consumo de zanahoria es ideal para fortalecer el cuero cabelludo naturalmente, por su alto aporte de vitaminas A, C y E, así como minerales como el fósforo y el potasio.
“La zanahoria es un tubérculo del que a menudo se dice que es el alimento saludable perfecto. Esto se debe a que es deliciosa, versátil y altamente nutritiva, pero baja en calorías”, le aseguró Ana Carolina de Barrascout, nutricionista certificada en coaching nutricional de Qílife Smart Nutrition, a Prensa Libre de Guatemala.
En concreto, la zanahoria ayuda a:
1. Evitar el quiebre y la caída.
2. Rejuvenecer el cabello.
3. Estimular el crecimiento.
4. Dar brillo y sedosidad.
Ahora bien, para tener el cabello sano no hay que lavarlo tan seguido, ya que el agua y los productos de limpieza le quitan los aceites naturales que lo ayudan a mantener la hidratación. Por ello, la recomendación es lavarlo cada dos o tres días.
Asimismo, lo más aconsejable es utilizar agua tibia, que no supere los 36 ºC y acabar el lavado con agua fría, para cerrar y sellar las cutículas, y conseguir así más brillo.
No obstante, el consumo de este vegetal no solo es ideal para el cabello, pues el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que la zanahoria sirve para:
1. Mejorar la digestión.
2. Prevenir el envejecimiento prematuro.
3. Mantener el bronceado y cuidar la piel.
4. Ayudar a bajar de peso.
5. Proteger la visión.
6. Fortalecer el sistema inmunológico.
7. Disminuir el colesterol “malo”.
8. Controlar la presión arterial.
9. Equilibrar el azúcar en sangre.
10. Promover la cicatrización.
Información nutricional por cada 100 g de zanahoria
- Energía: 34 kcals
- Carbohidratos: 7,7 g
- Proteínas: 1,3 g
- Grasas: 0,2 g
- Fibras: 3,2 g
- Calcio: 23 mg
- Vitamina A: 933 mcg
- Caroteno: 5600 mcg
- Vitamina B1: 50 mcg
- Potasio: 315 mg
- Magnesio: 11 mg
- Fósforo: 28 mg
- Vitamina C: 3 mg
Con respecto al consumo, Tua Saúde indicó que “la zanahoria puede ser consumida cruda o cocida en preparaciones como ensaladas, jugos, suflés, tortas, sopas o en guisos, junto a carnes o pescados”.
Para la preparación en jugo se necesitan:
- Cuatro zanahorias
- Tres vasos de agua
Preparación
Hay que lavar las zanahorias y pelarlas. Después se ponen en la licuadora con el agua y se licúan hasta conseguir una mezcla homogénea. Finalmente, se sirve el jugo y consuma.
Asimismo, otra manera de preparar jugo de zanahoria es con miel y para hacer la preparación se requiere de cuatro zanahorias, un limón, tres vasos de agua y miel. Una vez listas y lavadas, se debe proceder a cortar la zanahoria en cubitos y verterlos junto con el limón y el agua en la licuadora.
Una vez se haya obtenido una mezcla homogénea, se puede colar o beber directamente. En caso de querer agregar un toque dulce, se le puede adicionar un poco de miel.
No obstante, es importante señalar que ningún alimento por sí solo va a ser capaz de curar una enfermedad. Por ello, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es crucial consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir y sobre si las condiciones médicas existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades de los alimentos ya nombrados.
La información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.