La zanahoria es un alimento que proporciona diferentes beneficios para el cuerpo, ya que aporta vitaminas, minerales y antioxidantes. La forma en la que se consume también es clave para aportar al organismo distintos componentes.
De acuerdo con Ana Carolina de Barrascout, nutricionista certificada en coaching nutricional de Qílife Smart Nutrition, la “zanahoria es un tubérculo del que a menudo se dice que es el alimento saludable perfecto. Esto se debe a que es deliciosa, versátil y altamente nutritiva, pero baja en calorías”,
Esta verdura suele utilizarse para distintas preparaciones y recetas, debido al sabor, la textura y los beneficios que contribuye al ser humano. En ese sentido, el portal Cocina Vital da a conocer una serie de beneficios que tiene la zanahoria y son los siguientes:
Mejora la salud dental
Debido a su alto contenido de flúor, esta verdura es una gran aliada para conservar el esmalte dental. El consumo de zanahoria cruda ayuda a fortalecer los dientes y las encías y disminuye el riesgo de sufrir caries.
Mejora la salud digestiva
Ante sus grandes cantidades de fibra, esta verdura es una gran aliada para prevenir el estreñimiento. La zanahoria ayuda a reducir la acidez estomacal.
Revitaliza la mente
La zanahoria es rica en potasio y fósforo, razón por la cual es determinante para la salud del cerebro. Debido a que es rica en luteína, un antioxidante que ayuda a mejorar la memoria.
Mantiene la piel joven
Los altos niveles de beta-carotenos, los cuales actúan como antioxidantes, así como la vitamina A, son esenciales para proteger y reparar la piel dañada por los rayos ultravioleta.
¿Cómo consumir la zanahoria para tratar enfermedades?
En el informe World Cancer Report elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) se advierte que los carotenoides, también incluidos en otras hortalizas como las espinacas, pueden ser útiles para proteger contra padecimientos como el cáncer de mama.
Hay algunas formas de preparar las zanahorias que pueden ayudar a conservar sus propiedades y mejorar la prevención de ciertas enfermedades.
Por ejemplo, un estudio compartido por la Universidad de Newcastle, de Reino Unido, señala que las zanahorias que se cocinan enteras y luego se parten en trozos pueden ser más saludables. “Mantenerlas enteras y cortarlas después mantiene los nutrientes y el sabor en su interior, de modo que son mejores en todos sentidos”, le dijo al medio BBC la científica Kirsten Brandt.
Preparadas de esta forma podrían contener hasta un 25 % más de un compuesto llamado falcarinol. En experimentos que se llevaron a cabo con ratas, los investigadores encontraron que eran hasta un tercio menos propensas de desarrollar tumores en comparación a sus pares que no estaban sometidas a una dieta con zanahorias.
“Todo lo que se necesita es una olla más grande. Es una forma simple de que la gente incremente su ingestión de falcarinol, un componente que ha demostrado ser saludable”, le dijo Brandt a la BBC. “Cuando hablamos de la alimentación, sabemos que una dieta balanceada, rica en frutas y verduras, es lo que realmente ayuda a prevenir varios tipos de tumores, no solo un alimento específico”, agregó la experta.
Por su parte, Huercasa, un grupo empresarial dedicado a la producción de alimentos vegetales, indicó que el consumo de zanahorias puede ser de gran ayuda para prevenir algunas enfermedades.
Señalan, por ejemplo, que la zanahoria cocinada puede contener menos calorías y grasas que las zanahorias crudas y una mayor cantidad de agua.
“La zanahoria cocida o al vapor es nuestra gran aliada para paliar problemas o enfermedades de tipo digestivo, así como úlceras estomacales, gastritis, etc., gracias a los efectos calmantes que aporta cocida, además de ser reparadora y un suavizante de las paredes mucosas del sistema digestivo”, anota Huercasa.
De hecho, señalan que cuando se cocinan son más fáciles de procesar, debido a que los hidratos de carbono que contienen son más fácilmente digeridos por el organismo.