Desde el pasado martes 24 de marzo, la mayoría de los colombianos permanecen aislados en su casa. Aunque está permitido salir para comprar alimentos y realizar actividades fundamentales como el pago de facturas, la ida a un banco, entre otras, muchos han decidido recurrir a los  domicilios para evitar dejar su casa y tener un posible contagio.  La prueba es que, según las directivas de Rappi, la demanda de servicios en su aplicación ha crecido al menos un 40 por ciento en las últimas semanas. Y otros supermercados de cadena, lo mismo que pequeñas tiendas de barrio, han tenido que adaptar su forma de atención para suplir las necesidades de sus consumidores.  Países como China ya han demostrado que este es un factor clave para hacer frente al coronavirus, pues cuantas más opciones de servicio en línea existan, más fácil será lograr el distanciamiento social y evitar nuevos brotes de contagio.

Sin embargo, esta actividad tampoco elimina del todo el riesgo de transmisión del patógeno. Varios estudios han comprobado que el virus puede permanecer por varias horas sobre superficies y objetos. Por eso, ante el aumento de este tipo de compras en el país, el Ministerio de Salud emitió este viernes una serie de recomendaciones, tanto para aquellos que ofrecen el servicio, como para quienes lo reciben.  Para empezar, la cartera de Salud explica que, mientras perdure la emergencia, las empresas que siguen operando y entregan productos a domicilio, deberán establecer un control diario del estado de salud de sus trabajadores. Esto implica hacer revista de sus síntomas y, en caso de que los presenten, deberán informar a la autoridad sanitaria, la EPS y darles incapacidad de trabajo.   Además, deben dotar a los domiciliarios de mascarilla quirúrgica, guantes desechables, overol, bata al domiciliario y bolsas para que guarden la ropa de trabajo y posteriormente la laven. Esto sumado a un kit de limpieza que incluya agua jabonosa o gel antibacterial, toallas desechables para asear los productos y a ellos mismos cada vez que entren en contacto con otra persona. 

La cartera también recomienda a los trabajadores lavarse las manos mínimo cada 3 horas, así como al empezar y terminar servicios, y evitar el ingreso a cualquier domicilio. En cuanto a los vehículos, el consejo es desinfectarlos con la mayor frecuencia posible.  Quienes entregan el domicilio, como quien lo recibe, deben mantener siempre una distancia de dos metros. Y, en lo posible, procurar hacer los pagos con tarjeta débito o crédito y evitar el efectivo.   Los usuarios del servicio deben evitar recibir personas con síntomas de gripe y también usar tapabocas y guantes para recibir los domicilios. Este debe cubrir boca y nariz. En caso de vivir en un edificio, la recomendación es recibir el servicio en la recepción. Otra forma de prevención de contagio es solicitar que el producto siempre venga en doble bolsa.  En caso de que, como usuario, tenga una emergencia en su casa y necesite servicios a domicilio de plomería, instalación de conexiones de luz, entre otras cosas, el Ministerio de Salud recomienda tener en cuenta que: el trabajador debe portar guantes y tapabocas, y una vez dentro debe mantener la distancia de dos metros con el usuario. Al terminar el servicio, hay que limpiar y desinfectar la vivienda.