El té es una infusión muy popular en el mundo por los beneficios que genera en el organismo, pues ayuda para tratar síntomas como náuseas, deterioro cognitivo o las enfermedades de carácter cardiovascular, señala el portal Okdiario.
El té tiene variedades y cada una contiene diferentes nutrientes que le aportan al organismo humano.
El té verde contiene catequinas e isoflavonas que evitan el envejecimiento celular prematuro, otro de los beneficios que tiene esta bebida es su aporte para impedir “el endurecimiento de las paredes arteriales, ayudan a perder peso y reducen el riesgo de padecer cáncer de mama, próstata, pulmón y colon”, destaca Okdiario.
El té verde también ayuda a proteger la salud ósea y contiene la L-teanina, que es “un aminoácido que podría reducir el estrés”, apunta Infosalus.
Otro beneficio que tiene el té verde es “que la cafeína produce en el cerebro el bloqueo de un neurotransmisor inhibidor llamado adenosina”, señala el portal Healthline, que también resalta que la ingesta de esta bebida “incrementa la activación de las neuronas y la concentración de los neurotransmisores como la dopamina y la noradrenalina”.
El té verde es una de las bebidas más tradicionales y ayuda a la función cerebral a corto plazo y protege al cerebro del envejecimiento, señala dicho portal.
También destaca que el “Alzheimer es la enfermedad degenerativa más frecuente en los humanos y el Párkinson es la causa neurodegenerativa más común e implica la muerte de las neuronas productoras de dopamina en el cerebro”.
Ante estas dos enfermedades, varios estudios han demostrado que el té verde contiene componentes de catequina que puede proteger las neuronas y disminuir el riesgo de padecer Alzhéimer y Párkinson. “Estos estudios se llevaron a cabo en tubos de ensayo y animales”, remarca Healthline.
Otra variedad de esta bebida es el té blanco que ayuda en la prevención de diabetes, enfermedades cardíacas o distintos tipos de cáncer, así lo indica el mencionado portal web. Esta infusión también sirve aporta “energía al organismo de energía y mejora la salud del hígado”.
El té de hibisco es rico en vitamina C. Este nutriente ayuda a reducir la presión sanguínea y el colesterol nocivo para su salud, destaca Okdiario. Además, con esta infusión puede servir para “combatir infecciones bacterianas, mejorar la función hepática, tratar calambres menstruales y solucionar el estreñimiento”.
En el sitio web Infosalus advierten que es mejor tomar el té en bolsas y no en la presentación en botella. Asimismo indica que se debe evitar tomarlo con leche, pues “la caseína podría disminuir sus beneficios cardiosaludables. Tampoco se use la nata en su preparación, aunque sea desnatada, los ácidos grasos trans proporcionan la textura cremosa y aumentan los niveles de colesterol malo LDL”.
El té de menta es otra variedad que se destaca por su contenido de flavonoides antioxidantes y desde el punto de vista científico “se cree que el aceite de menta podría mejorar los síntomas de intestino irritable”, advierte Infosalus.
Los expertos destacan que falta investigación para comprobar los beneficios de el té de menta, pero se recomienda tomarlo en infusión, “es un viejo remedio digestivo que no tiene cafeína y su origen se encuentra en la antigua Grecia”, destaca el mencionado portal.
El té de manzanilla es reconocido por su aporte para controlar el azúcar en la sangre, también es ideal para calmar la ansiedad, alivia la inflamación y “reducir el colesterol, aunque sólo se ha observado en animales”, explica Infosalus.
En el sitio web Medlineplus se destaca que el té negro es rico en teaflavinas y tearubiginas, componentes con propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y reductoras de azúcar. Estudios mencionados por el portal, señalan que “la ingesta de este té fomenta la secreción de insulina saludable, al proteger células secretoras de insulina del páncreas”. Para recibir los beneficios del té se requiere ingerir 3 o 4 tasas al día.