Gracias a su aporte de vitaminas y proteína, el huevo es un alimento que no falta en cualquier plan de nutrición. Hay quienes empiezan la mañana consumiéndolo como parte del desayuno para aprovechar sus múltiples beneficios.

Entre su composición se destaca la presencia de vitaminas de la familia de las B, que se reconocen por proporcionar energía al cuerpo, pero además contiene vitamina A, que es óptima para la salud visual y vitamina D, esencial para la conservación de los tejidos del cuerpo.

La Fundación del Corazón señala que el número recomendado de huevos que se pueden consumir a la semana es entre tres y cinco. Para aquellos pacientes que padezcan niveles elevados de colesterol en sangre, se recomienda reducir esta cantidad a dos o tres huevos enteros o solo la yema, o de cuatro a cinco si solo se ingieren proteínas.

De igual manera, recomienda no consumirlo crudo, sino en platos calientes, es decir, cocidos, huevos revueltos, en tortillas y otros.

Este alimento tiene un grupo aporte de vitamínas y proteína | Foto: billnoll
La mayoría de las neveras tienen una bandeja de huevos en la puerta. | Foto: Getty Images
Huevo | Foto: Andrew Carmichael

Además, se sugiere consumir en lo posible utilizando más la clara que la yema, debido a que la mayor concentración de grasa se encuentra en esta última. Por ejemplo, se puede preparar un tortilla utilizando cinco claras y solo una yema.

Por su parte, desde el portal de salud y bienestar Vitonica indican que una de las maneras más saludables para incluir el huevo dentro de las recetas es cociéndolo, ya que así no se varía en gran medida su composición nutricional. En cambio, en otras preparaciones como el huevo frito o en tortillas se le suele agregar otros ingredientes que hacen que haya modificaciones en sus nutrientes.

Entre los beneficios de este modo de hacerlo se lista que no hay un aporte adicional de grasa, como sí sucede cuando se añaden aceites en los huevos fritos. No es un detalle menor si se tiene en cuenta que las sustancias grasas cuando se acumulan en cantidades excesivas en el cuerpo pueden poner en riesgo la salud cardíaca, causando el taponamiento de las arterias, como ocurre con el colesterol.

Entre tanto, el portal Mejor con Salud resalta que con este tipo de preparación se disfruta de un plato bajo en calorías, mientras que se obtiene la proteína de calidad presente en el huevo. Aunque cabe precisar que lo ideal es cocinarlo por un tiempo moderado, no superior a los 10 minutos, indican desde el portal, pues de lo contrario pueden perderse sus vitaminas.

Para complementar el plato del desayuno, se aconseja acompañar el huevo con verduras como los tomates, que también son reconocidos por ser fuente natural de múltiples nutrientes. De acuerdo con la guía de alimentos del portal Cuerpo Mente, esta verdura contiene la tripleta de vitaminas antioxidantes: vitamina C, vitamina A y vitamina E.

Beneficios de consumir huevo

Aumenta la masa muscular, por ser una buena fuente de proteínas y por contener vitaminas del complejo B, las cuales son importantes para darle energía al organismo.

Previene enfermedades como cáncer y aumenta el sistema inmune, por ser rico en antioxidantes como las vitaminas A, D y E, del complejo B, aminoácidos como el triptófano y tirosina, y minerales como el selenio y el zinc.

Disminuye la absorción de colesterol en el intestino, por ser rico en lecitina, el cual actúa en el metabolismo de las grasas. Además de esto, algunos estudios indican que el consumo regular de huevo podría ayudar a aumentar los niveles de colesterol bueno HDL.

Protege la visión, por ser rica en carotenoides como la luteína y zeaxantina, los cuales se acumulan en la retina del ojo, reduciendo el riesgo de degeneración macular.

Mejora la memoria, los procesos cognitivos y el aprendizaje, pues es rico en triptófano, selenio y en colina; esta última es una sustancia que participa en la formación de acetilcolina, un neurotransmisor importante para el funcionamiento cerebral. Además de esto, algunos estudios indican que podría prevenir enfermedades como Alzheimer y favorecer el desarrollo neurológico del feto, por ejemplo”.