Así como existen grasas que pueden impactar en la salud del organismo, hay otras que contribuyen a la mejora del mismo, y una de ellas es el omega-3.
De acuerdo con el portal web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, Medlineplus, el omega-3 es una grasa poliinsaturada, lo que quiere decir que sirve para las dietas y se encuentra en algunos alimentos.
“Necesitamos estas grasas para fortalecer las neuronas y para otras funciones importantes”, detallan los expertos. Además, órganos como el corazón, encargado de bombear la sangre oxigenada a todo el organismo, se ven totalmente beneficiados con el omega-3, agregan.
Por su parte, el blog Cuídate plus señala que la mencionada grasa saludable es un tema de gran interés para los profesionales en nutrición. Por ejemplo, uno de los aportes más relevantes es el del científico Hans Bang, quien “descubrió que los esquimales que vivían en Groenlandia tenían unos índices muy bajos de mortalidad por cardiopatías, debido a su dieta abundante en pescado”.
En ese orden de ideas, en cuanto a la variable de la alimentación, algunos de los productos que son ricos en omega-3 son:
- Los pescados azules (atún o salmón).
- Mariscos (ostras o mejillones).
- Vegetales de hoja verde (espinacas o lechuga).
- Aceites vegetales (sésamo, linaza, soja).
- Frutos secos (nueces o almendras).
Cantidades necesarias de omega-3
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos comparten las cantidades diarias recomendadas de ácidos grasos omega-3, las cuales se expresan en gramos (g) y dependen de factores como la edad o el sexo de las personas, de la siguiente manera:
- Del nacimiento a los 12 meses (0,5 g).
- Niños de 1 a 3 años (0,7 g).
- Niños de 4 a 8 años (0,9 g).
- Niños de 9 a 13 años (1,2 g).
- Niñas de 9 a 13 años (1,0 g).
- Adolescentes (varones) de 14 a 18 años (1,6 g).
- Adolescentes (niñas) de 14 a 18 años (1,1 g).
- Adultos hombres (1,6 g).
- Adultos mujeres (1,1 g).
- Mujeres y adolescentes embarazadas (1,4 g).
- Mujeres y adolescentes que amamantan (1,3 g).
Aparte de los alimentos ricos en omega-3, que aportan las cantidades necesarias para cada caso, el mismo organismo del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. detalla que también se comercializan suplementos dietéticos con base en la grasa saludable, los cuales incluyen el aceite de pescado, el aceite de krill, el aceite de hígado de bacalao y el aceite de alga.
No obstante, antes de considerar transformar una dieta o ingerir suplementos, lo mejor es asistir a un control médico, pues cabe decir que no todos los organismos son iguales y la ingesta de algunos de los productos mencionados pueden provocar efectos secundarios.
Por otro lado, “una deficiencia de omega-3 puede causar una piel áspera, escamosa y una erupción cutánea, con enrojecimiento, hinchazón y picazón”, aunque es una complicación rara, según los Institutos Nacionales de Salud.
La mejor hora para tomar omega-3
Teniendo en cuenta recopilaciones del escenario digital Telva, en la sección fitness, con el avance científico “se ha demostrado últimamente que tomar omega-3 por la noche es mejor que por las mañanas”.
La explicación de la anterior premisa es debido a que el cuerpo descansa en las noches, por lo que puede llegar a aprovechar en gran medida la grasa saludable a estas horas y, a su vez, “potenciar los intercambios y funciones de nuestro organismo”.
No obstante, los conocedores del tema advierten que se debe tener especial cuidado a la hora de tomar omega-3, si la persona tiene trastorno de coagulación de la sangre o consume medicamentos anticoagulantes.
Por lo tanto, cabe nuevamente precisar la importancia y necesidad de consultar con un médico sobre la ingesta de omega-3.