La principal fuente de vitamina D es el Sol, y el ser humano la toma cuando la piel está expuesta a rayos ultravioleta. También es posible hallarla de forma natural en algunos alimentos.

Los pescados grasos como la trucha, el salmón, el atún y la caballa aportan vitamina D. También los aceites de hígado de pescado, el hígado, la yema de huevo y el queso contienen cantidades pequeñas de esa vitamina. Además, los champiñones aportan algo de este componente y algunos productos lácteos, como la leche de almendra.

La vitamina D ayuda a que los huesos se mantengan fuertes y sanos, debido a que favorece la absorción de calcio presente en algunos alimentos. Se cree que las personas que tienen niveles bajos de esta vitamina pueden presentar una disminución en la fuerza muscular, mayor riesgo de lesiones y más capacidad de retener grasa.

El portal web Vitónica aseguró que la vitamina D es necesaria para el organismo debido a que se encarga de las siguientes funciones.

  • Las deficiencias de vitamina D se asocian con la reducción de la masa muscular y la fuerza.
  • La vitamina D influye en el metabolismo de las células del músculo esquelético (anabolismo).
  • Existe una contribución genética de la vitamina D al funcionamiento muscular.
Tomar el sol es una poderosa fuente de vitamina D. | Foto: Gettyimages

Cabe mencionar que algunas afecciones médicas pueden contribuir a la falta de esta vitamina en el organismo, tales como la obesidad y la nefropatía. Otras condiciones pueden afectar la absorción de vitaminas en el intestino, tales como: fibrosis quística, crohn, enfermedad celíaca y la cirugía de adelgazamiento.

Además, algunos medicamentos pueden afectar la presencia de esta vitamina en el cuerpo, como los esteroides, medicamentos anticonvulsivos, antiácidos (medicamentos para el reflujo) y fármacos para reducir el colesterol, según el portal web Scrubbingin.

El doctor Josep Blanch, presidente de la Sociedad Española de Investigaciones Óseas y del Metabolismo Mineral, señala que la carencia de la vitamina D se debe “a factores ambientales, sobre todo la elevada contaminación en las ciudades; además de otros como la edad, el tipo de piel y una dieta pobre en alimentos que contienen dicha vitamina”.

“Fatiga y cansancio, pesimismo y un estado de ánimo más deprimido, ligera excitabilidad, debilidad muscular, nerviosismo e insomnio, antojo de comer dulces, caries y gingivitis” son algunos de los síntomas que se presentan cuando hay deficiencia de vitamina D, así lo explica la revista Hola.

¿Qué se puede consumir para aumentar los niveles de vitamina D?

El portal de medicina y salud Medline Plus señala que hay algunos alimentos en los que se encuentra la vitamina D y se recomienda consumirlos.

  • Pescados grasos como el salmón, el atún y la caballa.
  • Hígado de res.
  • Hongos.
  • Yema de huevo.

También se puede obtener vitamina D de alimentos fortificados:

  • Leche.
  • Cereales de desayuno como la avena.
  • Jugo de naranja.
  • Otros productos lácteos, como el yogur.
  • Bebidas a base de soja.
La vitamina D puede ayudar a incrementar los niveles de masa muscular. | Foto: Copyright Dazeley

Signos de deficiencia de vitamina D

1. Dolor de huesos y dolores lumbares: las personas de todas las edades pueden presentar estos síntomas si padecen de deficiencia de vitamina D en el organismo. La mayoría de pacientes culpan a su edad de estos dolores cuando pueden haber otros factores que estén influyendo.

2. Fatiga: tener hábitos de sueño y alimenticios y la falta de ejercicio pueden contribuir a la falta de energía. Sin embargo, es importante validar los niveles de vitaminas presentes en el cuerpo. Algunas personas pueden perder los niveles de estos componentes con el tiempo y pueden sentirse fatigados; culpando a la vida diaria.

3. Dolores y calambres musculares: los receptores de la vitamina D se han relacionado con los receptores del cuerpo que detectan el dolor. La deficiencia de este componente puede ocasionar dolores musculares, calambres e incluso debilidad muscular.