Los probióticos son alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos destinados a mantener o mejorar las bacterias “buenas” (microbiota normal) del cuerpo, según Mayo Clinic.

Además, aportan beneficios como el fortalecimiento del sistema inmune, el equilibrio de la flora intestinal, el estímulo a la producción de vitaminas, el apoyo a la digestión y el aporte en cuadros diarreicos, de intolerancia a la lactosa, alergias y diarrea del viajero, provocada por comer alimentos contaminados.

De igual forma, los probióticos incrementan la resistencia a infecciones por organismos potencialmente patógenos en el intestino, incrementan el valor nutricional (mejor digestión, incremento de la absorción de vitaminas y minerales) y regulan la morbilidad intestinal (alivian la constipación y síndrome del intestino irritable, entre otros), mantenimiento de la integridad de la mucosa intestinal.

En cuanto a su relación con la salud mental, según el portal Farmaceuticonline.com, actualmente se están realizando diferentes estudios que indican que el consumo de algunos probióticos ayudan a mejorar o prevenir las afecciones asociadas al cerebro.

La depresión es una de las enfermedades mentales a las que puede ayudar este tipo de nutriente, sin embargo, es importante tener en cuenta que los estudios aún están en investigación y que se debe consultar a un psicólogo cuando se diagnóstica cualquier afección relacionada con el sistema nervioso.

“Entonces, aunque esta revisión sistemática de la literatura de investigación respalda la noción de que los prebióticos y los probióticos pueden ser de ayuda para las personas con ansiedad y depresión, se necesita más investigación”, dijo Allan Young, profesor de trastornos del estado de ánimo en el Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King’s College de Londres, citado por CNN.

“Las personas con depresión deben buscar consejo médico y no tratar de tratarse con suplementos dietéticos, que no tienen un beneficio comprobado”, agregó.

Otras funciones de los probióticos

  • Desplazar a los microorganismos nocivos para la salud y evitar su proliferación.
  • Colaborar en la formación de nutrientes esenciales como las vitaminas, las enzimas y los ácidos grasos.
  • Favorecer la absorción del calcio, hierro y magnesio.
  • Reducir la diarrea por antibióticos, que alteran el equilibrio de la flora intestinal, la que es restaurada gracias a estos microorganismos.

Los mejores alimentos ricos en probióticos

De acuerdo con el dietista y nutricionista, José Carlos Ramos, los probióticos se encuentran en alimentos fermentados y hay formas rápidas y sencillas de incluirlos en la dieta. Estos son algunos de los más recomendados:

  1. Yogur: este es uno de los alimentos que más contienen este tipo de nutrientes, sin embargo, al momento de comprarlos hay que asegurarse que no sean pasteurizados.
  1. Aceitunas y encurtidos: este tipo de producto contienen bacterias vivas tras el proceso de fermentación de estos vegetales.
  1. Queso crudo: es un alimento fabricado a base de leche no pasteurizada. Si la leche proviene de la cabra, tendrá muchos más beneficios.
  1. Tempeh: el origen de este producto es hindú, proviene de la fermentación de la soja y puede comerse salteado, horneado o crudo en ensalada.
  1. Chucrut: se obtiene a través de la fermentación de la col blanca o el repollo. Su sabor es ácido y tiene una textura crujiente.
  1. Kombucha: esta es una bebida que se realiza a base de té fermentado, además de ser natural no posee gluten y es considerada 100 % natural. De hecho, es una de las favoritas de los veganos.