De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, un tumor “es una masa anormal de tejido corporal”, que en algunos casos es benigno, y en otros, maligno.
El cáncer es la proliferación de células irregulares que se expanden por el cuerpo. La entidad americana de salud asegura que, además, es la enfermedad que causa más muertes en el mundo.
“El cáncer es la principal causa de muerte en el mundo: en 2020 se atribuyeron a esta enfermedad casi 10 millones de defunciones, es decir, casi una de cada seis de las que se registran”, explica la Organización Mundial para la Salud (OMS).
Muchos son los tipos de cáncer que existen que adoptan el nombre según sea su origen, y aunque cualquiera puede ser un factor de riesgo, los siguientes aumentan las probabilidades de padecer esta enfermedad terminal:
- Los malos hábitos: el consumo de cigarrillo, de cerveza y la alta exposición al sol pueden ser causantes de aparición de cáncer, de pulmón, hígado y piel, respectivamente.
- La edad: la Clínica Mayo asegura que las personas con más de 65 años son quienes son más diagnosticadas con cáncer. Sin embargo, cualquier persona puede sufrir de esta enfermedad.
- Sustancias externas: el consumo pasivo de cigarrillo es un ejemplo de aquellas toxinas que aumentan las probabilidades de padecer un cáncer, no porque sea un hábito directo, sino que con solo inhalar es perjudicial para la salud.
¿La fructosa aumenta las probabilidades de cáncer?
El Instituto Nacional del Cáncer asegura que un estudio evidencia las probabilidades del desarrollo de cáncer colorrectal tras la ingesta excesiva de fructosa, que es el principal azúcar que se encuentra de manera natural en la miel y las frutas.
El artículo publicado en el mes de octubre de 2021, advierte que dicha investigación se llevó a cabo en ratones y arrojó resultados sobre edulcorantes presentes tanto en el jarabe de maíz, como en el azúcar refinada, que pueden ser perjudiciales para la salud.
El estudio titulado ‘La fructosa en la dieta mejora la supervivencia de las células intestinales y la absorción de nutrientes’, presidido por Marcus Goncalves, MD, Ph.D., de Weill Cornell Medicine, entre otros, asegura que no solo la fructosa se ve relacionada con el cáncer, sino también con la obesidad siendo principales causas de muerte en el mundo.
Aunque esta investigación fue realizada en ratones, aún se adelantan estudios sobre los humanos porque aunque el jarabe de maíz o la fructosa tuvo una mayor incidencia en los roedores alimentados con ella, los investigadores entienden que estos animales tienen su tracto digestivo más corto que el de los seres humanos.
Es de mencionar que en una publicación de la Clínica Mayo se explica que el jarabe de maíz es alto en fructosa presente en las bebidas a sabor a fruta, que al igual que cualquier tipo de azúcar es dañino para la salud, influyendo en el desarrollo de la diabetes tipo II.
Cáncer colorrectal
La OMS asegura que “los tipos de cáncer más comunes son los de mama, pulmón, colon y recto y próstata” y que en el 2020 más de 10 millones de personas murieron por causa de esta enfermedad terminal.
Por su parte, la American Cancer Society informa que el cáncer colorrectal es uno de los relacionados con la alimentación y de los más temidos. Este tipo de afección empieza en el recto o en el colon, e inicia con pólipos que son “el revestimiento interno del colon o del recto”, y los cuales en algunos casos se convierten en cáncer.
Entre los signos que más se destacan se encuentran:
- Los dolores estomacales.
- El cansancio.
- La pérdida de peso.
- Estreñimiento o diarrea.
- Sangrado en el recto.
Es clave saber que ante la presencia de alguno de estos signos es importante consultar con un médico para descartar la afección, o iniciar un tratamiento.