Las vitaminas son sustancias importantes para el buen funcionamiento del cuerpo humano. Pueden obtenerse a través de la dieta diaria y los suplementos. Cuando no se tienen niveles suficientes, se pueden presentar afecciones de salud.

“El hecho de no consumir suficiente cantidad de frutas, verduras, legumbres, lentejas, granos integrales y productos lácteos enriquecidos puede incrementar su riesgo de problemas de salud, entre ellos enfermedad cardíaca, cáncer y salud ósea deficiente (osteoporosis)”, explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Incluir las frutas en un plan de alimentación es importante para la salud del cuerpo. | Foto: Getty Images

En su sección de salud, el portal web Mundo Deportivo señala varias de las vitaminas que son cruciales para mantener un sistema inmunológico fuerte y disminuir el riesgo de padecer diferentes enfermedades.

Vitamina A

Esta vitamina es valiosa para la producción de glóbulos blancos, específicamente los linfocitos, los cuales tienen un papel importante en el ataque de células cancerígenas. Este nutriente es clave para aumentar las defensas y combatir infecciones. Asimismo, tiene efectos positivos para la visión, debido a su contenido de retinol.

“También repercute en la piel, haciendo más sana y cuidada gracias a su efecto antioxidante. De hecho, la vitamina A interviene en la formación de las células de la piel, así como de otras mucosas y tejidos corporales como los huesos, los dientes, el pelo y las uñas”, apunta el portal web.

Vitamina D

La vitamina D no tiene efectos en la producción de glóbulos blancos; sin embargo, contribuye a alargar su vida útil. “Esto provoca que aunque no ayude en su producción, sino que provoca un aumento de glóbulos blancos, convirtiéndose en una de las mejores vitaminas para aumentar las defensas”, explica el sitio web.

La vitamina D puede obtenerse a través de la exposición moderada al sol, la alimentación diaria y la toma de suplementos. Estos últimos deben ser supervisados por un doctor.

Se debe utilizar bloqueador solar antes de exponerse a espacios abiertos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Vitamina C

La vitamina C es conocida popularmente por proteger al organismo del resfriado y de la gripa. Sobre esto, se debe aclarar que:

“Aunque no está completamente probado, las dosis grandes de vitamina C pueden ayudar a reducir la duración de un resfriado. No protegen de contraerlo. La vitamina C también puede ser útil para aquellos expuestos a períodos breves de actividad física grave o extrema. La probabilidad de éxito puede variar de una persona a otra. Algunas personas mejoran, mientras que otras no”, detalla Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Tener niveles suficientes de vitamina C ayuda tener un sistema inmunitario fuerte. Esto es clave para que las defensas puedan evitar las enfermedades.

“La vitamina C es un excelente antioxidante, indispensable para evitar el envejecimiento de nuestras células, además de proteger las membranas de los vasos sanguíneos. Sus funciones como antioxidante lo convierten en un excelente remedio para evitar las enfermedades degenerativas asociadas a la edad, como el alzhéimer o la arterioesclerosis, así como previene las mutaciones celulares que dan pie al cáncer”, agrega el portal web Mundo Deportivo.

Déficit de vitamina A

Los síntomas, como la pérdida de visión, debido a la deficiencia de la vitamina A empiezan siendo mínimos y por eso algunas personas no saben identificarlos. Esto empieza como un problema de adaptación para ver en la oscuridad. La Academia Estadounidense de Oftafmoogía, menciona que las personas que presentan este síntoma pueden ver bien cuando hay suficiente luz, pero no pueden hacerlo en la oscuridad. Es importante identificar estas señales, debido a que largo plazo pueden derivar en la pérdida de la visión y ceguera.

Los problemas visuales advierten sobre déficit de vitamina A. | Foto: Getty Images

Para conocer si hay un déficit de esta vitamina se debe prestar atención a los síntomas y realizar un examen ocular. A través de esta prueba se puede diagnosticar si el paciente necesita un tratamiento para aumentar la presencia de vitamina A en su organismo.