Una mala circulación se presenta casi siempre en las piernas y esto se debe a que las venas no cuentan con la capacidad de retornar la sangre hacia el corazón; por ende, el líquido rojo se empieza acumular, generando agotamiento y cansancio en la zona.
Este padecimiento se puede complicar, causando acumulación de sangre en las mismas, lo que hace que se vean protuberancias en las venas, por ende ante la presencia de los primeros síntomas se recomienda consultar con un profesional de la salud para evitar futuras complicaciones, como la vena várices.
También es conocida como las arañas vasculares, una variación leve y común de las várices, son simplemente un problema estético. Para otras, es posible que causen dolor y malestar. A veces, las venas varicosas ocasionan problemas más graves.
Cuando no se genera el tratamiento correcto para las venas várices puede empeorar el flujo de sangre, pues la sangre en el área se detiene y se acumula en las venas, ocasionando hinchazón, dolor constante, coágulos sanguíneos y cambios en la piel.
Actualmente, bajo supervisión médica, es posible contar con los tratamientos adecuados para sobrellevarlas o eliminarlas. Entre dichos métodos está hacer ejercicio e incluso, LaVidaLucida.com, compartió una serie de entrenamiento deportivo que ayuda a esta afección:
- Estocadas: al igual que el ejercicio anterior, debe pararse con los pies separados a la anchura de los hombros y los brazos a los lados. Luego, dé un paso adelante con una pierna y baje la cadera hacia el suelo, manteniendo la rodilla de la pierna delantera en un ángulo de 90 grados.
Esta rutina debe ser de tres series que lleven 10 repeticiones por pierna, descansando 30 segundos entre cada serie.
- Pedaleo: consiste en simular el movimiento que se realiza mientras se monta una bicicleta, es decir, hacer un pedaleo en el aire. Para hacerlo, es necesario recostarse en el suelo y con las piernas elevadas ir flexionando las rodillas de manera intercalada.
- Elevación de piernas: en este ejercicio debe acostarse en el suelo con las piernas rectas y los brazos a los lados. Luego, levante lentamente las piernas hacia el techo, manteniéndolas rectas. Mantenga la posición durante unos segundos y después baje las piernas lentamente. Haga tres series de diez repeticiones cada una, descansando 30 segundos entre cada serie.
- Elevación de talones: pare los pies separados a la anchura de los hombros y los brazos a los lados. Luego, levante los talones del sueño mientras mantiene los dedos de los pies en el suelo. Lo usual es que mantenga la posición durante unos segundos y baje los talones lentamente.
Este ejercicio mejora la circulación sanguínea en las piernas y reduce la aparición de las várices. Los expertos indican hacer tres series de doce repeticiones y descansar 30 segundos en cada serie.