Como es bien sabido, mantener una dieta alimenticia saludable durante un tiempo permanente tendrá efectos positivos en cada zona del cuerpo humano. Por eso, es de vital importancia eliminar del consumo diario los productos cargados con grasas dañinas, sodio, azúcar y demás elementos que puedan perjudicar la salud a nivel general.

En el caso del cerebro, es relevante tener cuenta que un estilo de vida saludable es capaz de reducir el riesgo de padecer una enfermedad como el Alzheimer, demencia por cuerpos de Lewy, demencia frontotemporal, entre otras más.

Cabe mencionar que “el cerebro se puede definir como un órgano complejo, ubicado dentro del cráneo, que gestiona la actividad del sistema nervioso. Forma parte del Sistema Nervioso Central (SNC) y constituye la parte más voluminosa y conocida del encéfalo. Está situado en la parte anterior y superior de la cavidad craneal y está presente en todos los vertebrados. Dentro del cráneo, el cerebro flota en un líquido transparente, llamado líquido cefalorraquídeo, que cumple funciones de protección, tanto físicas como inmunológicas”, explica el sitio web Cognifit.

Y agrega que aunque “coloquialmente se diga que el cerebro debe ser entrenado y ejercitarlo como un músculo para evitar que se atrofie, en realidad debemos tener claro que no es un músculo. No está compuesto por miocitos, las células musculares, sino que está formado por millones de neuronas que, interconectadas mediante axones y dendritas, permiten regular todas y cada una de las funciones del cerebro, cuerpo y la mente: Desde respirar, pasando por comer o dormir, hasta la capacidad para razonar, para enamorarnos o para discutir con alguien. Todo esto pasa por el control cerebral, siendo sólo una parte de todas las funciones de este órgano”.

Cuidar del cerebro es tan importante como preservar el buen funcionamiento de todos los órganos del cuerpo. | Foto: jonathan Kitchen

El cerebro también está encargado de regular la temperatura del cuerpo, la presión sanguínea y la tasa cardíaca. Además, recibe, procesa, integra e interpreta la información otorgada por los cinco sentidos. Asimismo, controla cada uno de los movimientos.

Es de resaltar que el cerebro es el responsable de las emociones y conductas de cada persona. Entre sus características, este pesa entre 1,4 y 1,5 kilos. Flota en el líquido cefalorraquídeo y lo componen más de 100 billones de células nerviosas.

Ahora bien, como se enfatizó en párrafos anteriores, un estilo de vida saludable es muy importante para la salud cerebral. En este sentido, la plataforma digital Cuídate Plus menciona cuáles son los mejores alimentos para el cerebro:

  • Carnes magras como, por ejemplo, la de pollo o la del pavo, que acumulan pocas grasas.
  • Pescados grasos como, por ejemplo, el salmón y como el pescado azul pequeño. Entre estos resaltan la caballa, la sardina o el marisco.
Los ácidos grasos como el omega-3 y el ácido docosahexaenoico, pueden favorecer el desarrollo del cerebro del bebé. | Foto: Getty Images
  • Frutos secos. En diferentes estudios controlados se ha evidenciado que las nueces pueden mejorar la capacidad cognitiva.
  • El café y el cacao, al ser ambos muy ricos en sustancias como los ponifelones, se han asociado en diversas investigaciones con un mejor rendimiento cognitivo.
  • Frutos pequeños en particular como las uvas o las fresas.

Los alimentos mencionados se deben incluir en la dieta alimenticia, pero no se debe abusar de su consumo, pues esto no permitiría que sus nutrientes se puedan absorber de buena manera en el organismo.

Por último, cabe mencionar que la práctica constante de actividad física, como mínimo tres veces por semana, ayuda a fortalecer el cerebro y a mantenerlo sano. También es relevante hacer hincapié en que la lectura, actividades como el abecedario y el crucigrama, oxigenan el cerebro constantemente.

Foto de referencia sobre el cerebro | Foto: Phil Leo / Michael Denora