Durante la Semana Santa, algunas personas aprovechan para tener ‘minivacaciones’, por lo que pueden cometer ciertos descuidos que derivan en esos kilitos de más. Comer en exceso y no hacer ejercicio son, generalmente, el talón de Aquiles para quienes desean bajar de peso.

De acuerdo con información de MedlinePlus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, sin importar qué tipo de dieta lleve una persona, para bajar de peso es necesario que queme más calorías de las que consume todos los días.

Mantener un peso saludable resulta fundamental para evitar enfermedades como la obesidad. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las principales causas de esta condición son el aumento en la ingesta de alimentos de alto contenido calórico y un descenso en la actividad física. En consecuencia, una de las recomendaciones frecuentes en los consultorios médicos tiene que ver con dos pilares fundamentales: dieta balanceada y ejercicio diario.

MedlinePlus detalla que, en el caso de la mayoría de las personas con sobrepeso, reducir aproximadamente 500 calorías al día es un buen punto de partida para bajar de peso. En ese sentido, explica que consumir 500 calorías menos por día equivale a perder 450 gramos por semana (cerca de una libra).

Es pertinente anotar que no todos los cuerpos reaccionan de la misma manera, por lo que antes de intentar cualquier método para bajar de peso es recomendable consultar con un especialista médico para contar con acompañamiento adecuado.

¿Cómo reducir 500 calorías diarias?

El ejercicio y la dieta balanceada, así como el descanso, resultan indispensables para lograr un mejor estado físico, disminuyendo los excesos en el porcentaje de grasa. MedlinePlus reseña algunas prácticas que pueden ayudar en el proceso:

Tener cuidado con los refrigerios

Las cantidades, los horarios y el tipo de comida juegan un papel clave. Algunas personas recurren a uno o varios refrigerios distribuidos durante el día, entre cada comida principal.

Es importante que estos alimentos tengan bajo contenido calórico, por ejemplo: “en lugar de una bolsa de 3 onzas (85 gramos) de totopos de maíz - o nachos- con sabor artificial (425 calorías), elija una taza (250 mg) de palomitas de maíz reventadas con aire caliente (31 calorías), una taza (250 mg) de uvas y un palito de queso bajo en calorías (180 calorías) o una manzana pequeña y 12 almendras (160 calorías). Elegir refrigerios saludables dos veces al día le ahorrará 500 calorías”, sostiene la información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Atender a la distribución y composición de los refrigerios va de la mano con eliminar los antojos que contienen demasiadas calorías, como pasteles, rosquillas o brownies. La ingesta principal viene con las tres comidas del día (desayuno, comida y cena). Además, es recomendable realizar una caminata vigorosa de 40 minutos después de haber comido para quemar, en promedio, 150 calorías.

Evitar las bebidas azucaradas

Según anota MedlinePlus, una lata de soda regular de 12 onzas tiene cerca de 150 calorías. Dicha información puede detallarse en el cuadro nutricional de cada alimento que se obtiene en tiendas o supermercados.

Un par de bebidas azucaradas durante el día pueden acumularse para alcanzar 500 calorías o más. Es preferible tomar agua, café o té negro en su lugar y así ahorrar sus calorías para alimentos que generen mayor saciedad.

Evitar la comida frita

Freír la comida añade calorías y grasas saturadas, por eso, se sugiere preferir opciones a la parrilla, asadas o cocidas. Por ejemplo, una porción grande de papas a la francesa puede añadir casi 500 calorías a una comida. En su lugar, una opción puede ser reemplazarlas por verduras o ensaladas.

Finalmente, la actividad física es indispensable para acelerar la quema de calorías, además, fortalece los músculos, mejora la capacidad pulmonar y trae una serie de beneficios que, en su conjunto, incrementa la sensación de bienestar en las personas.