El atún (Thunnus thynnus), comúnmente conocido como atún rojo o cimarrón, pertenece a la familia de los escómbridos, orden Peciformes, de acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición (FEN).
Además, reveló que su carne posee un 12 % de grasa, lo que lo convierte en un pescado graso y, además, se trata de una grasa rica en ácidos grasos omega-3.
Por otro lado, el atún es el pescado habitual en la dieta que posee más contenido en proteínas de alto valor biológico (23 g por 100 g), superior incluso a las carnes.
Asimismo, entre las vitaminas del grupo B, el atún es fuente de B6, niacina, D y B12. El contenido en esta última supera al de las carnes, huevos y quesos, alimentos que son fuente natural de esta vitamina.
Adicionalmente, el atún también es fuente de vitamina D, pues una ración aporta el 250 % de las ingestas recomendadas de esta vitamina para el grupo de población de estudio.
En cuanto a los minerales, el atún es fuente de fósforo y posee un alto contenido de selenio.
No obstante, es comúnmente consumido desde las latas que contienen mercurio y por ello “no es recomendable consumir más de dos latas de atún a la semana”, según expertos citados por el Diario de Sevilla.
Sobre la misma línea, indicó que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) “estableció que el consumo máximo de mercurio a la semana es de 1,3 microgramos por cada kilogramo que se pese”.
Lo anterior es porque, si se come suficiente pescado que contenga mercurio, la toxina puede acumularse en el cuerpo y aunque es poco probable que el mercurio cause problemas de salud para la mayoría de los adultos, es particularmente dañino para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso de los niños por nacer y de los niños pequeños.
Por ello, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades del alimento ya nombrado, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
¿Cuánto pescado se debe comer?
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos recomienda el pescado como parte de una dieta saludable para la mayoría de las personas, pero las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando, y los niños pequeños deben evitar comer pescado con el potencial de altos niveles de contaminación por mercurio.
- Los adultos deben comer por lo menos 8 onzas (226,80 g) o dos porciones de pescado rico en omega-3 a la semana. El tamaño de la porción es de 4 onzas (113,40 g) o aproximadamente el tamaño de una baraja de cartas.
- Las mujeres embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando, deben comer hasta 12 onzas (340,20 g) de mariscos por semana de una variedad de opciones que son más bajas en contaminación por mercurio.
- Los niños también deben comer pescado de opciones con menos mercurio una o dos veces por semana. El tamaño de la porción para niños menores de 2 años es de 1 onza (28,34 g) y aumenta con la edad.
“Las personas que consumen pescado y otros mariscos corren un menor riesgo de presentar varias enfermedades crónicas. Sin embargo, no está claro si estos beneficios para la salud vienen simplemente por comer estos alimentos o del omega-3 en estos”, señaló el Instituto Nacional de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.