La avena es un alimento saludable y tiene razones beneficiosas de sobra para que sea incluida en la dieta diaria. Lo cierto es que es uno de los cereales más completos y que ofrece gran versatilidad para completar desayunos y cenas saludables.
Su contenido nutricional es muy alto, pues tiene hierro, magnesio, zinc, fósforo, tiamina (vitamina B1), vitamina B6 y folatos, además de ser fuente de potasio y vitamina E, entre otros, según la Fundación Española de la Nutrición (FEN). Es más, el portal Mejor Con Salud, reveló que el agua de avena es ideal para purificar la sangre y limpiar las arterias, ya que ayuda a eliminar las toxinas.
Para sacarle provecho, un vaso de agua de avena en ayunas es suficiente. La avena es rica en omega-6 y ácido linoleico (una de las llamadas grasas buenas y tiene propiedades para reducir el colesterol). Según los expertos, la avena es baja en calorías (389 kcal/100 gramos) y también ayuda a sentirse saciado con facilidad.
Los expertos indican que la incorporación de avena en una dieta adecuada y un régimen de ejercicio puede ayudarlo a perder peso. Por sí solo, no puede deshacerse de todo el exceso de peso, ni puede hacer milagros. En ese orden de ideas, la recomendación es combinar una buena alimentación con ejercicio, deporte y otros buenos hábitos de vida.
Adicional, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, señaló que para ser más específicos en los temas de sangre, “la avena es rica en un tipo específico de fibra, conocida como betaglucano, que disminuye la absorción de grasas a través del intestino, reduciendo los niveles de colesterol llamado ¨malo¨ o LDL, en sangre, previniendo enfermedades cardiovasculares graves, como infarto o ACV”.
Asimismo, señaló que “por ser rica en fibras, la avena disminuye la velocidad de absorción de azúcar de los alimentos, ayudando a controlar los niveles de glucosa en sangre, evitando así la resistencia a la insulina y la diabetes”.
De igual forma, puntualizó que “la avena es muy rica en antioxidantes, especialmente avenantramidas, que aumenta la producción de óxido nítrico en el organismo, una sustancia que ayuda a relajar los vasos sanguíneos, facilitando la circulación de la sangre y reduciendo la presión arterial”.
Lo recomendable es consumir esta bebida en ayunas, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS) con una cantidad que oscile entre los 25 y los 30 gramos diarios, lo que equivale a 3 o 4 cucharadas al día. A su vez, hacerse en el marco de una alimentación saludable y la práctica regular de actividad física, para que sus beneficios realmente se hagan efectivos.
Formas adicionales de consumir avena
Es importante señalar que esta no es la única forma de obtener los beneficios, pues la FEN señaló que este cereal es muy versátil y otras recomendaciones para consumirlo son:
- Batido: mezclar ½ plátano, una taza de leche, tres cucharadas de avena, diez almendras y hielo al gusto y licuar. Además, se pueden variar las frutas y otras buenas opciones son: fresas, moras, melocotón, entre otras.
- Cocida: mezclar 1/3 de taza de avena en hojuelas con una taza de la leche, y se puede agregar azúcar, canela y vainilla al gusto. Después hay que cocinar a fuego medio hasta que la mezcla se espese bien y listo. Al servirla se puede complementar con algo de fruta y frutos secos para añadir algo de proteínas y grasas al plato.
- Horneada: al hornear la avena con otros ingredientes se puede hacer granola o muesli caseros. Para ello se necesitan mezclar de una a dos tazas de avena con los ingredientes favoritos y algunas ideas son: almendras en láminas, nueces, coco rallado, pasas, arándanos deshidratados, pepitas de chocolate, semillas de chía, entre otros. Después se debe colocar la mezcla en un recipiente, añadir de una a dos cucharadas del aceite de oliva virgen extra y dos cucharadas de azúcar o edulcorante al gusto. En seguida, hornear a 250 °C de 25 a 30 minutos.