La chía es una semilla que cada vez toma más fuerza en el mercado, que es incluida en los planes de alimentación, incluso en aquellas dietas que son trazadas para bajar de peso porque es rica en fibras y vitaminas, con la capacidad de contrarrestar varias enfermedades.
Se debe tener en cuenta que la ingesta de chía debe ser moderada; sin embargo, tras su consumo, una persona puede:
- Reducir el colesterol porque sus fibras ayudan a la eliminación de la grasa de algunos alimentos, colaborando en una buena digestión. Es entonces que el colesterol es “una sustancia cerosa” que se deposita en los vasos sanguíneos, precisa la Clínica Mayo.
- Disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, gracias al omega-3 que contiene, porque puede regular el colesterol, evitando el desarrollo de enfermedades como la aterosclerosis, que es una afección que se debe a la acumulación de placa en las arterias, siendo la causa principal de muerte en los Estados Unidos, según la National Heart, Lung and Blood Institute (NIH).
¿Cuántas veces se debe comer chía?
Para empezar, estas semillas, ayudan en la pérdida de peso por la sensación de llenura que producen, reduciendo el apetito. Es tan versátil en la cocina que se puede incluir en ensaladas de frutas, vegetales, jugos y demás.
Pero, aunque anteriormente se hizo una lista de sus beneficios, la American Society for Nutrition en un artículo escrito por Jessica Currier, asegura que aún falta evidencia sobre las ventajas del consumo de chía, porque las investigaciones que se han realizado han sido en animales más no en seres humanos.
Asimismo, en la publicación “Ingestas dietéticas de referencia de vitamina C, vitamina E, selenio y carotenoides”, por la National Library of Medicine, señala que las cantidades del consumo diario de chía varían, por ejemplo, los hombres mayores de 58 años de edad deben comer 30 gramos, mientras que los menores 38 gramos. Las mujeres menores de 50 años, 25 gramos; y las mayores 21 gramos, información confirmada por Mejor con salud.
Es entonces que cumpliendo con las medidas mencionadas, según la edad, una persona puede agregar semillas a sus preparaciones durante el día.
Las semillas que ayudan a bajar de peso
Existen otras semillas que en la actualidad han tomado más fuerza al ser implementados en un plan de alimentación sano como:
Semillas de girasol
Son ricas en minerales como el cobre, el zinc y el hierro que contribuyen en la salud del cuerpo que pueden ser añadidas a cualquier tipo de comida.
Entre sus beneficios se encuentra aumentar la masa muscular, ya que es rica en proteína. Al igual que las semillas de chía, las de girasol tiene un efecto de saciedad que no permiten la ingesta de otros alimentos, por lo que contrarrestan el apetito.
Estas semillas deben ser consumidas de manera moderada porque son ricas en grasas, es decir, que tienen un alto índice calórico.
Semillas de cáñamo
Las semillas de cáñamo son fuente de ácidos grasos que tienen un efecto antioxidante, aportando grandes beneficios a la salud del organismo, entre los que se encuentran: la mejora de la memoria, la prevención de enfermedades cardíacas y el tratamiento para contrarrestar el acné, explica en su portal, Tua Saúde.
El portal citado explica que estas semillas al tener aceites como el omega-3 y el omega-6 tienen un efecto sobre “el daño oxidativo de las células”, por lo que ayuda a prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, aterosclerosis, entre otros.
De acuerdo con la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, la aterosclerosis es el “endurecimiento de las arterias” que se produce por el cúmulo de grasa y colesterol alto en sus paredes. En la mayoría de los casos se produce por envejecimiento.