El ejercicio físico es un factor clave para mantener un buen estado de salud; al mismo tiempo que ayuda a gestionar algunas enfermedades como la diabetes y el colesterol elevado.

“Se ha demostrado que la actividad física regular ayuda a prevenir y controlar las enfermedades no transmisibles, como las enfermedades cardíacas, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes y varios tipos de cáncer. También ayuda a prevenir la hipertensión, a mantener un peso corporal saludable y puede mejorar la salud mental, la calidad de vida y el bienestar”, explica la Organización Mundial de la Salud.

Ejercitarse regularmente tiene múltiples beneficios para la salud. Dentro de estos se incluyen los siguientes:

  • Reduce los síntomas de depresión y ansiedad.
  • Mejora el bienestar general del organismo.
  • Garantiza el buen crecimiento y desarrollo de los jóvenes.
  • Reduce el riesgo de caídas, fracturas y lesiones.
  • Ayuda a mantener un peso saludable.

Sobre esa misma línea también se debe destaca que el ejercicio tiene efectos positivos para la memoria. De acuerdo con los estudios la actividad física regular es beneficiosa para la salud cerebral. Así lo explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.

Aunque la práctica de ejercicio tiene muchos beneficios, una de las grandes dudas de varias personas es cuánto tiempo de actividad física es necesaria para vivir saludablemente. Esta inquietud la resolvieron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y afirmaron que, con “300 minutos por semana de actividad moderada (60 minutos al día durante 5 días a la semana), o 150 minutos a la semana de actividad intensa (30 minutos al día durante 5 días a la semana), o una combinación equivalente, obtendrás aún más beneficios para tu salud”.

Los mitos más grandes sobre la práctica del ejercicio físico

Andrés Hernández, médico deportólogo de Colsanitas, explica y aclara algunos de los mitos asociados a la actividad física.

  • El sudor indica que el ejercicio es efectivo. Falso. La sudoración es la vía más eficaz del cuerpo para manifestar que está generando calor, además de regular la temperatura del cuerpo y limpiar impurezas. “No quiere decir que el ejercicio sea efectivo, sino que es la forma en la que el organismo disipa el calor que se produce por el ejercicio”, afirma Hernández.
  • Para quemar grasa son suficientes los ejercicios cardiovasculares. Falso. El cardio es beneficioso para quemar calorías y generar un déficit. Sin embargo, para bajar el porcentaje de grasa en el cuerpo se deben consumir menos calorías de las que se gastan, mantener una alimentación balanceada y realizar ejercicios de cardio y fuerza.
  • Se puede reducir grasa en zonas específicas. Falso. Cuando hay un déficit calórico el cuerpo recurre a las fuentes de energía que tiene almacenadas en general, no lo hace de manera específica, así se trabaje más en alguna zona del cuerpo. “Eso sí, el cuerpo sacará más energía de donde haya mayor cantidad acumulada”, afirma el doctor Hernández.
  • Ejercitarse con fajas térmicas ayuda a perder peso. Falso. Las fajas cumplen la función de deshidratar, aumentar la temperatura de la zona y generar sudoración. Según el especialista, “lo que realmente pasa es que la grasa se está distorsionando dentro de la célula grasa, es decir, simplemente se está aplastando”.