El alzheimer es el tipo de demencia más común en los adultos mayores. Esta es una enfermedad que causa que el cerebro se atrofie y las neuronas cerebrales mueran.
De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, con el paso del tiempo los síntomas de esta enfermedad empeoran.
“Las personas pueden no reconocer a sus familiares. Pueden tener dificultades para hablar, leer o escribir. Pueden olvidar cómo cepillarse los dientes o peinarse el cabello. Más adelante, pueden volverse ansiosos o agresivos o deambular lejos de su casa. Finalmente, necesitan cuidados totales. Esto puede ser muy estresante para los familiares que deben encargarse de sus cuidados”, señala la entidad.
Los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explican que esta enfermedad es progresiva.
“La enfermedad de Alzheimer tiende a desarrollarse lentamente y empeora en forma gradual a lo largo de varios años. Con el tiempo, la enfermedad de Alzheimer afecta la mayoría de las áreas del cerebro. Esta enfermedad puede afectar la memoria, el pensamiento, el juicio, el lenguaje, la capacidad de resolución de problemas, la personalidad y el movimiento”.
La calidad de vida de las personas con esta enfermedad se ve reducida. Necesitan de un cuidador o un enfermero para realizar la gran mayoría de sus actividades diarias.
El portal web de la Asociación de Alzheimer señala que una persona con esta enfermedad puede vivir de 4 a 8 años, luego de haber recibido el diagnóstico. No obstante, dependiendo cada caso, un paciente puede vivir hasta 20 años.
¿Cómo cuidar a una persona con Alzheimer en etapa avanzada?
La comodidad de estas personas es fundamental en los cuidados. Por eso, el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de Estados Unidos (NIA, por sus siglas en inglés) brinda algunas recomendaciones para los cuidadores de pacientes con esta enfermedad en etapa avanzada.
- Comprar colchones y cojines especiales que tengan forma de cuña para aliviar la presión en las llagas del paciente.
- Cambiar de posición a la persona mínimo cada 2 horas.
- Ubicar un tablero en el regazo del paciente para que los brazos estén apoyados cuando esté sentado.
- Al mover al paciente, lo recomendable es darle previamente un paño para que este no se agarre al cuidador ni de otros objetos.
Respecto a la alimentación:
- Darle al paciente comida que pueda comer con las manos, como trozos pequeños, frutas frescas o verduras.
- Alimentos de calorías altas como malteadas de proteínas.
- Utilizar grasas saludables al momento de preparar los alimentos (aceite de oliva). Se debe tener mucho cuidado en caso de que el paciente tenga problemas cardíacos, pues la alimentación es clave para evitar complicaciones.
Importancia de la actividad física para contribuir a la prevención del alzheimer
Realizar actividad física regular ayuda a combatir otros factores de riesgo del Alzheimer, como la depresión y la obesidad, advierte Mayo Clinic.
La entidad señala que hacer de media a una hora de ejercicio varias veces a la semana puede ayudar a obtener los siguientes resultados:
- En el caso de las personas que padecen la enfermedad, contribuye a mejorar la memoria, el razonamiento, el juicio y la capacidad de pensamiento.
- Ayuda a retrasar el inicio o el avance de la enfermedad en personas que tienen un alto riesgo de desarrollarla.
- En las personas que no tienen alzheimer, ayuda a conservar la capacidad de pensamiento, razonamiento y aprendizaje.
- Contribuye al aumento del tamaño del área del cerebro relacionada con la construcción de memoria, el cual es el hipocampo.