El cáncer de pulmón se forma en los tejidos del pulmón, frecuentemente se desarrolla en las células que recubren los conductos de aire. Según indica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Estados Unidos, esta enfermedad es la principal causa de muerte por cáncer en hombres y mujeres en el mundo.
“Hay dos tipos principales, cáncer de pulmón de células pequeñas y cáncer de pulmón de células no pequeñas. Estos dos tipos crecen de manera diferente y se tratan de manera diferente. El cáncer de pulmón de células no pequeñas es el tipo más común”, detalla la Biblioteca.
La principal causa del desarrollo del cáncer de pulmón es el tabaquismo, alrededor del 90% están asociados con esta práctica. Mientras más cigarrillos se fumen al día, más el tiempo que lleva haciéndole, mayor será el riesgo de padecer este tipo de cáncer. “El consumo de productos de tabaco, como puros y pipas, también aumenta el riesgo de cáncer de pulmón. El humo del tabaco es una mezcla mortal de más de 7000 sustancias químicas, muchas de ellas tóxicas. Se sabe de al menos 70 que causan cáncer en personas o animales”, detallan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
El cáncer de pulmón comienza en los pulmones y puede hacer metástasis en otros órganos del cuerpo. Igualmente, un tipo de cáncer, que haya iniciado en otro órgano, puede diseminarse a los pulmones.
Los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explican que en la mayoría de los casos este cáncer no presenta síntomas en la primera etapa de la enfermedad, sino que aparecen cuando ya está avanzada. Algunos de estos incluyen:
- “Una tos reciente que no se va.
- Tos con sangre, incluso en pequeñas cantidades.
- Dolor en el pecho.
- Ronquera.
- Pérdida de peso sin intentarlo.
- Dolor de huesos.
- Dolor de cabeza”.
En cada persona los síntomas pueden presentarse de manera diferente, por lo que el desarrollo del cáncer puede variar en cada individuo. Por lo general, el cáncer de pulmón se desarrolla en personas que superan los 70 años de edad. Sin embargo, en el caso de los fumadores, en especial quienes empezaron a hacerlo desde muy jóvenes, el riesgo de padecer cáncer de pulmón puede aparecer a partir de los 40 años, reseña el Portal de Salud de Castilla y León.
Además de causar efectos negativos en los pulmones, fumar también daña la piel. De acuerdo con Taylor Hays, MD, experto de Mayo Clinic, fumar es un factor que puede incrementar el proceso de envejecimiento natural de la piel, contribuyendo a la formación de las famosas “patas de gallo”, líneas de expresión y un tono de piel grisáceo.
La tasa de supervivencia después de la detección del cáncer de pulmón es de 5 años. “Para todas las personas que tienen cualquier tipo de cáncer de pulmón, la tasa de supervivencia a 5 años es 21 %. Para los hombres, la tasa de supervivencia a 5 años es del 17 %. Para las mujeres, la tasa de supervivencia a 5 años es del 24 %. La tasa de supervivencia a 5 años del NSCLC es del 25 % en comparación con la del 7 % del cáncer de pulmón de células pequeñas”, explica la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica.
Para disminuir el riesgo de contraer el cáncer de pulmón es importante realizar cambios en el estilo de vida. Evitar fumar cigarrillo y tabaco, para no ingerir las sustancias tóxicas de estos productos. Asimismo, es fundamental evitar exponerse a este humo, es decir, al “humo de segunda mano”. Los fumadores pasivos son las personas que no fuman, pero que reciben de forma indirecta el humo del cigarrillo, producido por una persona que está a su alrededor.