Las mascotas son una gran compañía para muchas personas en todo el mundo, pues los animales expresan su amor de diferentes maneras, bien sea batiendo la cola, ladrando o maullando, tocando con sus patas a sus dueños y hasta mordiéndolos suavemente.
En ese sentido, estos animales que conviven con los humanos suelen entregar su cariño a los amos y hacer sus días más amenos, pues los ayudan a liberar el estrés que produce la vida diaria. Pero desde siempre ha existido una duda, en cuanto a la edad y es: ¿por qué mueren tan pronto?
Esa pregunta ha rondado en la cabeza de centenares de personas, pero ello, científicos se han dedicado a estudiar la vida de los animales, encontrando algunas posibles razones por las que esto ocurre.
Encontraron que en algunos casos la muerte de los animales puede producirse por enfermedades o algún tipo de problema en su corazón, como registra el portal Cosumer, de acuerdo con médicos veterinarios de Universidad de Georgia, que analizaron las posibles “causas de fallecimiento en un total de 75.000 perros, de 82 razas distintas, en hospitales clínicos” en todo el territorio de los Estados Unidos. Esto se dio a conocer en Veterinary Medical Database, una revista científica especializada.
Otra de las posibles causas es la obesidad y ello se relaciona con la diabetes, pues en los animales también ocurre, como en los humanos, que su páncreas no produce la insulina suficiente para controlar al azúcar en el organismo.
De acuerdo con un estudio publicado en la Librería Nacional de Medicina de los Estados Unidos, titulado Descomposición del equilibrio entre el tamaño y la duración de la vida: por qué los perros grandes mueren jóvenes, “no se encontró una correlación clara entre el tamaño corporal y el inicio de la senescencia”.
“El riesgo de referencia es ligeramente mayor en perros grandes, pero la fuerza impulsora detrás de la compensación entre el tamaño y la duración de la vida aparentemente es una fuerte relación positiva entre el tamaño y la tasa de envejecimiento. Concluimos que los perros grandes mueren jóvenes principalmente porque envejecen rápidamente”, puntualiza el estudio.
Vale decir que los gatos pueden vivir entre 12 y 18 años, dependiendo del estilo de vida que hayan llevado, esto incluye el cuidado, enfermedades y demás; mientras que en los perros, esto puede variar, ya que algunos pueden vivir 6 años, mientras que otros pueden durar 10 o 13 años, respectivamente, conforme informa el Clarín.
Así las cosas, la médico veterinaria y zootecnista María Paula Contreras Abello, brindó a SEMANA algunas pautas para cuidar la salud de los peluditos en casa:
- Medicina preventiva: Mantener hábitos de prevención, que quiere decir, por ejemplo, realizar desparasitaciones externas e internas con frecuencia, sin esperar a que la mascota se enferme. Además, tenerlos siempre con su esquema de vacunación y lo más importante realizar exámenes complementarios para chequear que sus órganos funcionen bien.
- Administrarles la comida según la tabla de nutrición, “ya que vemos muchos perritos obesos”, expresó la médica.
- Realizar enriquecimiento ambiental a las mascotas, es decir, tratar de que puedan interactuar con la naturaleza en espacios abiertos, esto se hace para que tengan una buena salud mental.
De igual manera, el hospital veterinario AniCura menciona las comidas que jamás deben dársele a un perrito para evitar a mediano y a largo plazo problemas en su salud.
- Chocolate: De acuerdo con varios expertos en el tema, es un alimento no permitido en perros, ya que puede resultar tóxico. Porque contiene teobromina, un componente que los perros no metabolizan bien y que, por lo tanto, su organismo puede llegar a alcanzar altos niveles de intoxicación como consecuencia.
- Uvas pasas: Las uvas y pasas pueden resultar muy tóxicas para el perro, incluso en las cantidades más pequeñas pueden provocar fallo renal.
- Carnes saladas: Demasiado sodio puede generar algunas condiciones graves a los caninos. Los veterinarios recomiendan un consumo de 100 miligramos por 100 calorías, no solo en las carnes, sino en cualquier tipo de alimento.