De acuerdo con la Clínica Mayo, los frutos secos al ser incluidos en un plan de alimentación saludable reducen el riesgo de cualquier afección cardiaca, lo que no quiere decir que lo eliminen. No obstante, se debe considerar que estos alimentos tienen un alto índice calórico, por lo que es importante moderar su consumo.
Se caracterizan por ser alimentos ricos en ácidos grasos insaturados, colaborando en el bienestar de las arterias y en su salud; disminuyendo la formación de coágulos mismos que pueden ocasionar accidentes cerebrovasculares e incluso reducir los niveles de colesterol.
Compuestos de frutos secos
La Clínica hace un listado de los compuestos a destacar de los frutos secos, como:
- Omega-3: es un tipo de grasa poliinsaturada que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, se encuentra en varios alimentos, como algunas semillas, aceites vegetales, salmón y nueces.
- Grasas buenas: también llamadas grasas insaturadas, se dividen en dos: monoinsaturadas y poliinsaturadas que se encuentran en diferentes alimentos y son buenas para el organismo.
Lo anterior lo corrobora un artículo titulado “Beneficios para la salud del consumo de frutos secos”, escrito por Emilio Rosa, quien asegura que los frutos secos son alimentos ricos en nutrientes que tienen grasas insaturadas (buenas para la salud), proteína vegetal, compuestos fenólicos y minerales que influyen de manera favorable el organismo.
¿Cuántos frutos secos se deben comer para cuidar la salud del corazón?
La Clínica Mayo sugiere un consumo entre 4 a 6 porciones de frutos secos a la semana -según el tipo-, porque algunos son más saludables para el corazón, como las nueces, las almendras y las avellanas. En el caso de los menores de edad, es importante consultar con un profesional de la salud, porque las porciones van acorde a su edad. Cabe mencionar que una porción, según lo explica, pueden ser dos cucharadas de frutos secos o 43 gramos.
Entre tanto, estos son algunos frutos secos ideales para incluir en una dieta balanceada:
Nueces
Mejor con Salud en uno de sus artículos escrito y revisado por la nutricionista Eliana Delgado Villanueva señala que las nueces son frutos secos que tienen antioxidantes, fibras, proteínas, minerales y vitaminas con propiedades antiinflamatorias, que puede prevenir enfermedades hepáticas, osteoporosis, colesterol, entre otras.
Almendras
Un artículo de Tua Saúde revisado por la nutricionista Tatiana Zanin, dice que las almendras son frutos secos con muchas propiedades que ayudan a regular la glucosa de la sangre, aumentando también el colesterol HDL, gracias a los nutrientes que la componen, tales como, el fósforo y el calcio.
Además, asegura que las almendras tienen propiedades antioxidantes que combaten los efectos de los radicales libres, que como lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, deterioran las células del cuerpo e inciden en el envejecimiento prematuro.
Pistachos
Otro artículo de Tua Saúde precisa que el consumo de pistachos contribuye en mejorar la capacidad cognitiva porque están compuestos de antioxidantes, que gracias a su efecto antiinflamatorio reduce el riesgo de deterioro cognitivo, mejorando las funciones de capacidades cognitivas.
Además, procura el bienestar de la microbiota intestinal por las fibras y los fitoquímicos que los componen, brindándoles salud a las bacterias que favorecen el cuerpo. De igual manera, reduce los niveles de presión arterial alta.
Avellana
En la Guía de Alimentos de la revista Cuerpomente se describe la avellana como un fruto seco que tiene un alto porcentaje de calorías, por lo que es importante consumirla mesuradamente. Incluso señala que tiene un nivel de grasa hasta en un 65 %.
Se destaca por ser un alimento rico en antioxidantes que puede actuar con un efecto antiinflamatorio. Asimismo, el fósforo, el magnesio y el calcio son componentes que se destacan, por lo que es favorable incluirla en un plan de alimentación balanceado.