Mantener el cabello brillante, sedoso y en general bien cuidado es una tarea complicada. El pelo, al igual que otras partes del cuerpo, requiere de cuidados constantes para mantener vitalidad, brillo y prevenir su caída.
Las exposiciones constantes al sol, el calor de la plancha y el secador e incluso una mala alimentación, hacen que el cabello pierda vitalidad y se torne opaco, en especial, cuando se trata de cabellos rizados, pues estos suelen resecarse y trozarse con mayor facilidad.
Cuando un cabello se encuentra maltratado, empieza a crecer más lento de lo normal. Aunque más de 100 cabellos se caen diariamente, lo cierto es que, cuando son más, puede tornarse un problema incómodo para muchas personas.
Por fortuna, se han creado una variedad de métodos que ayudan a revitalizarlo y afortunadamente, nunca es tarde para repararlo. Además, para algunas personas, la melena puede significar una de las partes más importantes de su cuerpo.
Muchos de estos métodos son costosos y requieren de químicos supervisados por un médico. Sin embargo, también es posible acudir a algunos remedios caseros que, aunque tardan un poco más, también ayudan a reparar el cabello y, por lo tanto, a su crecimiento.
Teniendo en cuenta lo anterior, el portal especializado Mejor con salud listó una serie de remedios caseros y naturales que contribuyen a cumplir este objetivo:
Cepillado diario
Se aconseja que el cabello se peine todos los días con un cepillo que no maltrate y que el proceso sea despacio para no promover el daño.
El cepillado debe hacerse tres veces al día, por partes y de abajo hacia arriba. Primero, hay que desenredar las puntas y después subir poco a poco hasta que se llegue a la raíz.
Jugo de cebolla
Un estudio de Journal of Dermatology, publicado en 2002, mostró que el grupo de personas que se lavó el pelo con jugo de cebolla observó días después más crecimiento que quienes lo limpiaron utilizando solo con agua.
El portal Aló explica cómo aprovechar las propiedades con los siguientes ingredientes: dos tomates y una cebolla.
Preparación:
1. Picar el tomate y la cebolla.
2. Agregarlos en un recipiente y mezclar muy bien.
3. Aplicar en todo el cabello.
4. Dejarlo actuar por 15 minutos.
5. Enjuagar con abundante agua.
6. Se recomienda realizar este tratamiento una vez a la semana para mejorar los resultados.
Aceite de oliva
Gracias a sus propiedades hidratantes es el mejor aliado para el cabello seco y dañado. Sin embargo, también tiene otros grandes beneficios: ayuda a recuperar el brillo, fortalece el cabello para evitar las puntas abiertas y previene la caída, según la revista Vogue México.
¿Cómo usarlo?
1. Combinar la misma cantidad de aceite de oliva virgen y aceite de coco en una mezcla homogénea.
2. Frotar todo el cuero cabelludo y el largo del cabello.
3. Luego, dejar actuar durante 30 minutos y posteriormente, enjuagar con abundante agua fría. Esta mascarilla ayudará a fortalecer el cabello y evitar las puntas abiertas.
Zumo de patata
La papa contiene vitaminas y minerales que ayudan a fortalecer los folículos pilosos, otorgándole a la raíz del cabello un toque más oscuro. También, ayuda a que el cabello recupere sus aceites naturales y por lo tanto crezca.
¿Cómo usarlo?
Ingredientes: cuatro papas y dos litros de agua.
Preparación:
1. Se debe hacer es pelar bien las papas, para este remedio solo se va a utilizar la cáscara, que luego se va a poner a hervir en una olla con dos litros de agua.
2. Dejar hervir durante 30 minutos e ir mezclando mientras se cumple este tiempo. Pasado el tiempo retirar la olla del fuego y dejarla enfriar.
3. Luego, retirar las cáscaras y verter el líquido en un recipiente. El líquido se debe aplicar sobre el cabello luego de lavarlo, dando masajes en formar circular.
4. Dejar actuar durante 25 minutos y enjuagar con agua.
5. El medio sugiere aplicar este remedio unas tres veces a la semana para evidenciar los cambios en poco tiempo.