El dolor en la rodilla es una queja constante de las personas en todas las edades; sin embargo, los adultos tienen esta dolencia con mayor frecuencia. Por lo general, esto suele ser el resultado de una lesión, como la ruptura de un ligamento o un desgarro del cartílago.

De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, los síntomas que pueden acompañar al dolor de rodilla son la inflamación, rigidez en la zona, enrojecimiento, debilidad, inestabilidad, sonidos de chasquidos e incapacidad para enderezar por completo la rodilla.

Cuando se presentan este tipo de síntomas y permanecen por un periodo largo, es posible que se pueda desencadenar una enfermedad denominada artritis, la cual tener 100 tipos diferentes, entre los más comunes son la osteoporosis, la artritis reumatoide, la gota y la artritis séptica. De este modo, es importante acudir al médico ante la presencia de este dolor para determinar la causa y el tratamiento a seguir.

Normalmente, los tratamientos para tratar el dolor leve en la rodilla debe ir acompañados de una dieta saludable, una buena rutina de ejercicio y el consumo de vitaminas que se pueden encontrar en algunos alimentos.

Según el portal Panorama Web, da a conocer cuatro vitaminas que ayudan a eliminar el dolor en esta articulación y las molestias que esto provoca en el día:

  • Complejo B: hace referencia a las vitaminas B1, B2, B3, B5, B6, B7, B12 y ácido fólico, que ayudan a que el cuerpo tenga energía de la comida que se consume. Así mismo, ayuda a formar glóbulos rojos e impiden la debilidad muscular, por lo que ayuda a tratar el dolor en la rodilla. Este tipo de nutrientes se pueden encontrar en alimentos como el pescado, pollo, carne de res, huevos, productos lácteos, vegetales de hojas verdes, frijoles y judías.
  • Vitamina K: Medline Plus señala que esta vitamina liposoluble se conoce como el nutriente de la coagulación y es esencial para quitar el dolor de la rodilla, debido a que ayuda a formar los tejidos y huesos saludables a través de las proteínas. La mejor forma de obtener es por medio de estos alimentos: hortalizas de hojas verdes como la espinaca, col rizada (o berza), brócoli y lechuga; aceites vegetales; algunas frutas como los arándanos azules y los higos; carne, queso, huevos y granos de soja.