El derrame articular consiste en la inflamación de una articulación a causa de la acumulación excesiva de líquido, ya sea líquido sinovial o sangre. Por lo general, cuando se trata de sangre, se habla de hemartrosis, debido a un traumatismo, el cual puede causar un daño en el cartílago, según indica CAMDE, clínica de traumatología y fisioterapia en Málaga.

Cabe mencionar que las articulaciones que, con mayor frecuencia, padecen de un derrame articular son la rodilla, el tobillo y el hombro. Entre los síntomas más comunes que provocan esta afección son el dolor agudo en la zona, especialmente, al flexionar la articulación e incluso puede provocar la limitación de la movilidad. Adicional a ello, puede aparecer hinchazón de la articulación, enrojecimiento y, muchas veces, pueden percibirse deformidad y crepitaciones.

De acuerdo con la revista Mejor con Salud, son muchas las causas que pueden desencadenar un derrame articular, por lo que se suelen dividir en traumáticas y no traumáticas, así como en provocadas por inflamación local o sistemática.

  • Derrame articular por inflamación local: Esto se da cuando el derrame afecta una zona específica. En este caso, se puede dar por traumas y enfermedades degenerativas o enfermedades como la hemofilia.
  • Derrame articular por inflamación sistémica: Suele afectar varias articulaciones y las causas más comunes son afecciones como la gota, artritis reumatoide, lupus, artritis psoriásica, sarcoidosis y artritis séptica.

Para tratar este problema de salud es importante acudir al médico para determinar la causa, por medio de algunos exámenes clínicos como laboratorios y estudios de imagen, y así determinar el tratamiento adecuado.

En los exámenes de laboratorio se evalúa la proteína C reactiva (PCR) y la velocidad de sedimentación globular (VSG); y en los estudios de imagen, con frecuencia, el especialista ordena una artrosonografía o ecografía articular, pero también puede ordenar una tomografía computarizada o resonancia magnética dependiendo del caso. Es importante tener presente que estos estudios también ayudan a visualizar tumores, lesiones óseas y cambios degenerativos.

Si bien los expertos aconsejan acudir a algunas medidas que se pueden hacer en casa, como el reposo, el hielo local y algunos analgésicos, los especialistas en salud pueden indicar un procedimiento denominado artrocentesis terapéutica para tratar la sintomatología.

Este procedimiento consiste en la penetración del espacio articular para aspirar el líquido con una aguja. Esta intervención debe hacerse en condiciones estériles y por un médico experimentado.

¿Se puede prevenir el derrame articular?

Existen algunos factores que propician la aparición de un derrame articular, por lo que se deben evitar, por ello, Mejor con Salud da a conocer algunas recomendaciones:

  • Es fundamental mantener un peso adecuado, ya que esto disminuye hasta en un 90 % las molestias en las rodillas.
  • Se recomienda tener una buena higiene del sueño, pues dormir pocas horas o trabajar de noche tienen un impacto negativo en el organismo.
  • Realizar actividad física al menos 30 minutos por día.
  • Acudir al médico a tiempo si hay síntomas en las articulaciones.
  • No fumar y no tomar alcohol.