Es una rana de color dorado que habita en los bosques de niebla, muy común en los páramos, en alturas superiores a los 2.000 metros, y que no necesita de grandes cuerpos de agua para vivir pero si de un clima húmedo.Fue encontrada en el parque natural Chingaza, fuera de los bosques de alta montaña, en pequeños arbustos, y recibió el nombre de Pristimantis Dorado por su coloración y como tributo a la leyenda de El Dorado que hace referencia al territorio colombiano que los conquistadores creían que estaba construido en oro y que poseía infinidad de tesoros.Como todas las Pristimantis no tienen renacuajos, estas producen un huevo del que nace directamente una rana joven. Su canto es una de las particularidades de esta nueva rana. Esto se concluyó luego que se realizaran estudios bioacústicos donde se comparan los sonidos emitidos por la Pristimantis Dorado con el de otras especies.Este nuevo descubrimiento se suma a la Pristimantis macrummendozai, también conocida como rana de cejas amarillas, que fue encontrada en el municipio de Arcabuco, Boyacá un par de meses atrás. En Colombia este género es el más diverso y se cree que todavía hay muchas especies por descubrir.La investigación fue liderada por Mauricio Rivera-Correa investigador asociado al Grupo Herpetológico de Antioquia (GHA) y docente de la Universidad de Antioquia.Para el investigador no es inusual descubrir nuevas especies en Colombia, debido a la gran biodiversidad con la que cuenta el país. Según Rivera, en el trabajo de alta montaña es común descubrir ranas de este género con características únicas.“Es enorme lo que falta por descubrir, lo que pasa es que no hay suficientes personas que se dediquen a la investigación. No hay muchos profesores en universidades o institutos de investigación que se dediquen a buscar nuevas especies, pero en Colombia todavía hay mucho por descubrir” dijo el investigadorPara describir una nueva especie se realizan estudios de genética, morfología, y bioacústica, luego de estas investigaciones se concluyó que la Pristimantis Dorado tiene características propias no vistas en ninguna especie.“La combinación de toda su estructura es única, la combinación del color del iris, la forma del rostro, su canto, su coloración dorsal, la pigmentación del vientre, sus genes son distintos a otras especies” afirmó Rivera-Correa.La Pristimantis Dorado puede llegar a medir 1.7 centímetros en edad adulta. Al poblar el frágil páramo de Chingaza, cualquier cambio que el humano haga a su hábitat puede poner en riesgo la especie.Por último el Mauricio Rivera-Correa aseguró que Colombia puede descubrir muchas más especies de anfibios de las 800 que hasta ahora han sido descritas, pero invita que se cuiden los ecosistemas de los mismos.