El equipo internacional de investigadores que llevó a cabo el análisis genético del fósil encontrado en la cueva de Denisova, en el sur de Siberia, afirma que éste perteneció a una niña que no era ni neandertal ni humana moderna. Se trata -dicen los científicos en la revista Nature- de un grupo de humanos hasta ahora desconocidos que vivieron en gran parte de Asia durante la época del Pleistoceno. El pequeño fragmento de hueso de un dedo meñique fue encontrado en 2008 durante excavaciones arqueológicas en la Cueva de Denisova, en la cordillera de Altai.