El mango es una fruta que posee diversos nutrientes como vitaminas A y C, magnesio, potasio, polifenoles como mangiferina, kaempferol, ácido bezoico y fibras; ayudando a combatir inflamaciones, fortalecer el sistema inmune y reducir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), esta fruta es saludable y medicinal, gracias a su alta riqueza vitamínica que le otorgan una serie de propiedades diuréticas y laxantes.
No obstante, el mango posee una elevada cantidad de fructosa, que es un tipo de azúcar que se encuentra en las frutas, que mientras más madura se encuentre mayor será su concentración. Por este motivo, a pesar de sus beneficios, el mango debe ser ingerido en pequeñas porciones y debe evitarse por parte de aquellas personas que desean perder peso, que poseen diabetes y que tienen intolerancia a la fructosa, asegura el portal de salud y bienestar Tua Saúde.
De manera contraria, las hojas del árbol que produce esta fruta sí pueden resultar beneficiosas para las personas que padecen de diabetes, una enfermedad que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de los Estados Unidos, se presenta cuando el nivel de glucosa en la sangre, también conocido como azúcar en la sangre, es demasiado alto.
La glucosa en la sangre es la principal fuente de energía y proviene de los alimentos y es controlada por la insulina, una hormona que produce el páncreas y que ayuda a que la glucosa de los alimentos ingrese en las células para usarse como energía. Algunas veces, el cuerpo no produce suficiente o no produce nada de insulina o no la usa adecuadamente y la glucosa se queda en la sangre y no llega a las células.
Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas de salud, asegura la mencionada institución. Aunque la diabetes no tiene cura, la persona que la padece puede tomar medidas para controlar su enfermedad y mantenerse sana, aseguran los especialistas.
Normalmente cuando una persona tiene este padecimiento requiere de tratamiento médico; sin embargo, existen algunos remedios caseros que pueden ser complementarios a los medicamentos, aunque siempre su ingesta debe ser consultada con el especialista.
Uno de ellos es la infusión de hojas de mango, que consumido dentro de una dieta saludable y junto con un tratamiento médico, puede contribuir con el bienestar de los pacientes.
El portal Mejor con Salud cita un estudio publicado en 2019, en el cual se indica que las hojas de mango son potencialmente beneficiosas. Los investigadores lo resumen así: “El extracto de la hoja de la planta puede ser útil para controlar la diabetes y sus complicaciones, como la pérdida de peso y la alteración del perfil lipídico”, precisa el mencionado sitio web.
De esta forma, la infusión de hojas de mango sería útil como tratamiento coadyuvante de la angiopatía diabética y la retinopatía diabética. También ayudaría a tratar la hiperglucemia, dentro de un estilo de vida saludable y con supervisión médica.
Dos de los compuestos de esta bebida son: el taraxerol-3 beta y el extracto de acetato de tilo, los cuales estimulan la síntesis de glucógeno, una sustancia que abunda en el hígado y en los músculos y que puede transformarse en glucosa cuando el organismo lo requiera.
¿Cómo prepararla?
Para preparar esta infusión se requiere de cuatro hojas de mango tiernas y un litro de agua. Se pone a hervir el agua en un recipiente, se incorporan las hojas y se dejan cocer durante cinco minutos. Por último, se apaga el fuego, se cuela la infusión y se deja reposar.
Se puede tomar a lo largo del mismo día de su preparación, para evitar que pierda las propiedades. Para notar beneficios, es recomendable consumirla siempre con moderación y previa consulta con el médico.
Otros beneficios
Gracias a los taninos, esta infusión también fortalece el sistema inmune, ya que actúan como una fuerte antioxidante que combinada con otros minerales protegen de enfermedades, principalmente virales, asegura el portal Gastrolabweb.
Por otra parte, esta infusión tiene propiedades depurativas debido a su ácido tartárico y málico, sustancias que ayudan a eliminar las toxinas del organismo, por lo que es muy usado para disolver los cálculos en los riñones y la vesícula.
Otro de los beneficios de las hojas de mango es que actúan como expectorante por su contenido de beta-caroteno, el cual trabaja sobre las mucosas y ayuda a eliminar la flema, la tos y el dolor de garganta. Por último, entre sus usos también destaca la disminución de la presión arterial por sus propiedades hipotensoras, a la vez que fortalece los vasos sanguíneos y trata los problemas de las várices.