Los dientes requieren de cuidados especiales, una mala higiene bical puede desencadenar enfermedades en otras partes del cuerpo. Entre las recomendaciones más frecuentes brindadas por los profesionales de la salud está visitar a un odontólogo cada seis meses, cepillarse los dientes tres veces al día, haciendo uso de seda dental; por su parte el enjuague bucal debe usarse en las mañanas y las noches.

Esta es una de las zonas que no solo se deben cuidar por salud sino también porque hacen parte de la estética de una persona y es una de las cosas que más sobresalen a la hora de hacer cosas tan cotidianas como reírse o hablar.

El color de los dientes puede determinarse por la higiene que se lleve a cabo en la zona. Según explica el portal de la Clínica Dental Menedent, cada paciente tiene un color característico en su dentadura que es dado por factores genéticos; sin embargo, una mala higiene en los mismos puede tender a que tornen de un color amarillo.

“El sarro es una película que se adhiere al diente y provoca un color amarillo en las zonas de transición con la encía. Existe, además, la posibilidad de que desde el nacimiento se presenten alteraciones de los dientes y sean de un color distinto al blanco”.

Hay que cepillarse los dientes tres veces al día. | Foto: Cepillarse los dientes

Algunos pacientes tienen los dientes de color amarillo no por una mala higiene bucal sino por alguna patología que ocasiona dicho síntoma. “Trastornos genéticos como la dentinogénesis y la amelogénesis imperfecta afectan al esmalte y la dentina provocando un color amarillento e, incluso, marrón en los dientes”.

Cabe mencionar que estos trastornos son diagnosticados con poca frecuencia así que casi siempre que los dientes empiezan a tomar un color amarillento se debe a una mala práctica de higiene en la zona; además cabe mencionar que algunos alimentos suelen ocasionar esto en los dientes cuando se consumen en exceso, como productos con cafeína, dulces y el tabaco.

Cuando los dientes se tornan de este color y no es por mala higiene o por alguno de los trastornos mencionados anteriormente, hay que entrar a analizar otras posibles causas. Entre ellas se encuentra que en algunas ciudades o zonas geográficas, el agua del grifo contiene cantidades exageradas de flúor, lo que puede hacer que los dientes cojan un tono más amarillento.

Otro factor que puede hacer que los dientes tengan un color amarillo es el consumo de algunos medicamentos; entre ellos se encuentra la tetraciclina. Según la biblioteca de salud y medicina de los Estados Unidos Medlineplus este medicamento es usado para tratar “las infecciones causadas por bacterias incluidas la neumonía y otras infecciones del tracto respiratorio; algunas infecciones de la piel, de los ojos, del sistema linfático, del aparato digestivo, del aparato reproductor y del sistema urinario; y algunas otras infecciones que se propagan a través de garrapatas, piojos, ácaros y animales infectados”.

El cigarrillo hace que los dientes tomen un color amarillo. | Foto: Getty Images /Peter Dazeley

Consejos para blanquear los dientes

El portal de cuidado personal y salud Healthline menciona que para evitar que las manchas de cualquier tipo aparezcan en los dientes, se puede hacer lo siguiente:

Cabe mencionar que antes de seguir este tipo de recomendaciones se debe contar con la aprobación de un odontólogo que apruebe seguir estos consejos y hacer uso de determinados productos en los dientes.

Cepillar los dientes | Foto: Copyright 2015 Superb Images
  • Enjuague con aceite u oil pulling.
  • Cepillarse con bicarbonato de sodio, aunque esto podría desgastar el esmalte dental luego de un periodo prolongado de su uso. Por tal razón, la recomendación es que, después de lavar los dientes, se aplique bicarbonato en el cepillo; esto se debe realizar esporádicamente, máximo una vez al mes.
  • Comer frutas como la fresa, porque son ricas en antioxidantes, ácido málico y vitamina C y estos beneficios componentes ayudan con el blanqueamiento y más cuando se consumen antes de cepillarse los dientes.
  • Evitar consumir bebidas que manchen los dientes, como tinto, vino tinto o gaseosas oscuras.