El colesterol es una sustancia cerosa necesaria en cantidades moderadas para que el cuerpo pueda llevar a cabo determinadas funciones vitales para su buen funcionamiento.

El organismo se encarga de producir la cantidad necesaria para dichos procesos; sin embargo, cuando un paciente tiene malos hábitos alimenticios y prioriza el consumo de alimentos ultraprocesados y cargados de grasa, los niveles de este lípido aumentan de manera desproporcionada.

Cuando esto sucede el cuerpo no puede hacer uso de toda esa sustancia y es cuando esta grasa se empieza a adherir a las paredes de las arterias impidiendo la libre circulación de la sangre, limitando la cantidad de oxígeno y de líquido rojo que llega a otros órganos del cuerpo como el corazón y el cerebro. Esta afección puede detonar en un infarto o ataque cerebral.

Para evitar la acumulación de placa en las arterias es pertinente cuidar la alimentación, practicar actividad física con frecuencia, en dado caso de fumar dejarlo de hacer y limitar a lo más mínimo el consumo de alcohol.

El portal de salud, belleza y cuidado personal Healthline brinda algunas recomendaciones para cuidar de la salud de las arterias. “Nunca es demasiado tarde para adoptar una dieta más equilibrada. Así como años de mala alimentación pueden dañar el cuerpo, una buena alimentación puede ayudar a sanarlo”.

La obesidad y el sobrepeso son detonantes de diversos problemas de salud. Para reducir el colesterol es necesario comenzar a cambiar hábitos de vida. | Foto: Fertnig/Getty Images
  • Aumentar el consumo de grasas buenas: estas grasas se les conoce como no saturadas, estas se encuentran presentes en pescados azules como el salmón, la caballa, el atún y el boquerón. También está presente en el aguacate, las aceitunas, las semillas, los frutos secos y el aceite de oliva extra virgen.
  • Limitar el consumo de grasas saturadas: esta se encuentra principalmente en algunos tipos de carne, por lo que se recomienda siempre ingerir cortes magros.
  • Aumentar el consumo de fibra soluble: esta elimina de manera natural los niveles de colesterol malo en la sangre y aumenta los buenos. La fibra está presente en la mayoría de las frutas, también está presente en la avena, en los vegetales y en granos como las lentejas y los frijoles.
El tamarindo contiene fibra tanto soluble como no soluble, la elimina grasas y azúcares. | Foto: Foto: Getty images.
  • Limitar el consumo de azúcar: el medo explica que el azúcar que se encuentra de manera natural en las frutas (fructosa) tiene una carga importante de vitaminas y nutrientes, sin embargo, el azúcar que se le añade a determinados productos que venden en los supermercados no genera ningún tipo de valor nutricional.
  • La idea es priorizar el consumo de alimentos saludables y en su estado natural. Abusar de la ingesta de gaseosas o jugos industrializados y de otros productos cargados de azúcar puede poner en riesgo la salud del paciente y puede hacer que sea diagnosticado con otras patologías como la diabetes.
Este tipo de productos pueden generar obesidad, diabetes e hipertensión. | Foto: Getty Images
  • Mantener un peso saludable: si se tiene un peso que está por encima del adecuado para la talla del paciente, es pertinente acudir con un nutricionista para que este diseñe un plan de alimentación adecuado para poder estabilizarlo, ya que tener sobrepeso aumenta el riesgo de padecer enfermedades como la diabetes, el colesterol elevado, entre otras.