El dolor se presenta en cualquier región de la cabeza y puede manifestarse como un dolor intenso, una sensación de pulsación o un malestar leve y continuo, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que el tipo de dolor de cabeza más común es la cefalea tensional y puede estar relacionada con el estrés, la depresión, la ansiedad, un traumatismo craneal o sostener la cabeza y el cuello en una posición anormal.
Sin embargo, otro tipo de dolor de cabeza es la cefalea migrañosa, que implica un dolor fuerte que generalmente ocurre con otros síntomas, como cambios en la visión, sensibilidad al ruido o a la luz o náuseas. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la migraña una enfermedad incapacitante.
“Se calcula que la prevalencia mundial de la cefalea (al menos una vez en el último año) en los adultos es de aproximadamente 50 %. Entre la mitad y las tres cuartas partes de los adultos de 18 a 65 años han sufrido una cefalea en el último año, y el 30 % o más de este grupo ha padecido migraña”, explicó la OMS.
Asimismo, la biblioteca explicó que otro tipo son los dolores de cabeza de rebote, dolores que continúan reapareciendo y pueden ocurrir a raíz del consumo excesivo de analgésicos.
Dicho lo anterior, el portal Salud180 reveló que la hierbabuena ayuda a aliviar el dolor de cabeza de manera natural, ya que es analgésica y antiinflamatoria.
Sobre la misma línea, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde indicó que “la hierbabuena, especialmente utilizada en forma de aceite, presenta efectos antiinflamatorios y analgésicos que inhiben los receptores del dolor, siendo muy usada para dolores de cabeza. Sin embargo, algunas personas pueden presentar alguna reacción alérgica a la hierbabuena, especialmente cuando se aplica el aceite en la piel.”.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.
Adicional, es importante indicar que si el dolor de cabeza empeora en 24 horas, si se presenta mala pronunciación, cambios en la visión, problemas para mover los brazos o las piernas, pérdida del equilibrio, confusión o pérdida de la memoria con el dolor de cabeza, si el dolor de cabeza es intenso y solo en un ojo, con presencia de enrojecimiento en dicho ojo, es importante consultar a un médico, ya que en raras ocasiones un dolor de cabeza puede ser un signo de una causa más seria, como:
- Sangrado en la zona entre el cerebro y el tejido delgado que lo cubre (hemorragia subaracnoidea).
- Infección cerebral como meningitis o encefalitis, o absceso.
- Tumor cerebral.
- Acumulación de líquido dentro del cráneo que lleva a hinchazón cerebral (hidrocefalia).
- Acumulación de presión dentro del cráneo que parece ser un tumor, aunque no lo es (pseudotumor cerebri).
- Intoxicación con monóxido de carbono.
- Falta de oxígeno durante el sueño (apnea del sueño).
- Problemas con los vasos sanguíneos y sangrado en el cerebro, como malformación arteriovenosa (MAV), aneurisma cerebral o accidente cerebrovascular.
De igual forma, la biblioteca señaló que algunos dolores de cabeza pueden ser un signo de una enfermedad más grave y por ello se debe buscar ayuda médica inmediatamente sí:
- Es el primer dolor de cabeza que alguna vez se haya tenido en su vida e interfiere con las actividades diarias.
- El dolor de cabeza se presenta súbitamente y es explosivo o violento. Este tipo de dolor de cabeza necesita atención médica de inmediato. Puede deberse a la ruptura de un vaso sanguíneo en el cerebro.
- El dolor de cabeza es “el peor alguna vez sentido”, incluso si regularmente se padece.
- El dolor de cabeza se presenta con un traumatismo craneal.
- Se tiene más de 50 años y los dolores de cabeza apenas comenzaron.
- Los dolores de cabeza están asociados con problemas de visión, dolor al masticar o pérdida de peso.
- Se tienen antecedentes de cáncer o problemas en el sistema inmunitario (como VIH/sida) y se presenta un nuevo dolor de cabeza.