La rodilla es una de las articulaciones del cuerpo que con mayor frecuencia desarrolla artrosis, una enfermedad degenerativa y de “desgaste” que se presenta en las personas adultas mayores debido a que el cartílago se desgasta gradualmente, disminuyendo la proyección de los huesos.
De acuerdo con la Clínica Universidad de Navarra, la razón más frecuente de la artrosis de rodilla, en comparación con otras articulaciones del cuerpo, es que esta parte del cuerpo es una articulación de carga; es decir, que soporta el peso del cuerpo y de los objetos que se transportan de pie. Entretanto, la artrosis se desarrolla lentamente y la progresión del dolor suele seguir la misma progresión.
Adicional al dolor que se genera en la rodilla y el desgaste de cartílago en la rodilla, también se presentan síntomas como inflamación de la articulación, rigidez de la articulación y fallo de la pierna al cargar en ella. En los casos en los que se alcanzan fases más avanzadas de la enfermedad, además del dolor, que se hace más continuo e intenso, el paciente sufre una disminución en los movimientos que puede realizar con la rodilla (por ejemplo, no puede flexionar o extender completamente la pierna).
Normalmente, esta afección no tiene cura, pero los síntomas se pueden aliviar por medio de medicamento, infiltraciones o procedimientos específicos para disminuir las dolencias que provoca este problema articular. Adicional a ello, el portal web El Clarín, da a conocer cinco consejos que ayudan a mejorar la condición de la rodilla cuando hay un desgaste del cartílago:
1. Actividad física y beber líquido: llevar una buena rutina de ejercicio y beber mucho líquido, son dos formas eficaces y saludables para evitar el sobrepeso, una de las causas más comunes de la artrosis de rodilla, además del desgaste articular.
2. Elongación como prevención: esto hace referencia a los estiramientos y la elongación para evitar futuros daños. Por ello, se aconsejan tomarse 10 minutos como mínimo para calentar y estirar. Las personas que desarrollan trabajo en los que pasan mucho tiempo de pie, también deben realizar estiramientos para aminorar la sintomatología de la artrosis de rodilla.
3. Aplicar frío y calor: específicamente, el frío es bueno para reducir la inflamación de la rodilla y el calor mejora la circulación sanguínea y el índice de cicatrización de tejidos involuntarios. Así las cosas, se debe recubrir el hielo con un trapo o colocar un trapo remojado con agua caliente durante intervalos de 3 a 5 minutos hasta por media hora al día.
4. Mantener una alimentación saludable: hay alimentos específicos que ayuda a mantener los cartílagos. Por lo general, estos contienen lisina, colágeno y ácido hialurónico y se encuentra en las proteínas animales, el queso, los frutos secos, huevos, gelatinas y atún.
5. Tratamiento médico: para resolver un problema que afecta el cartílago de la rodilla conviene buscar atención profesional donde se pueden recetar inyección de medicamento, analgésicos y fisioterapia.
Métodos naturales para el desgaste de rodilla
Aplicar aceite de oliva
Mejor con Salud señala que el aceite de oliva, al tener propiedades antioxidantes, puede ayudar a desinflamar esta zona, por lo que, con la ayuda de cáscaras de limón y hojas de eucalipto, sería una de las mejores soluciones.
- En un frasco de vidrio agregar las cáscaras, las hojas trituradas y aceite.
- Conservar en un lugar fresco por aproximadamente dos semanas.
- Colar y aplicar.
El sitio web aconseja humedecer una gasa y cubrir con vinipel la rodilla, dejándola actuar toda la noche. Repetir este ejercicio varias veces en la semana.
Hierbas naturales
Algunas de las que funcionan para este propósito fueron listadas por el portal Mejor con Salud:
- Jengibre: el consumo de jengibre puede ser beneficioso si lo que se quiere es aliviar el dolor y la dificultad para mover las articulaciones, así lo han encontrado estudios referenciados por el portal de salud Healthline.
- Cúrcuma: tiene propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antioxidantes. Por ello, combate adecuadamente los procesos infecciosos del cuerpo, asegura en su página web la Liga Reumatológica Catalana.
- Boswellia: posee una resina gomosa que se ha usado durante años en la medicina asiática, sobre todo, en la India para tratar dolores en las articulaciones. Según explica CuerpoMente, la planta contiene propiedades antiinflamatorias derivadas del ácido hialurónico.