El dolor articular puede ser causado por diversos tipos de lesiones o afecciones. Puede estar relacionado con artritis, bursitis y dolor muscular.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos indica que este padecimiento puede estar relacionado con algunos factores como enfermedades autoinmunitarias, como la artritis reumatoidea y el lupus, las infecciones causadas por un virus, lesiones, osteoporosis, osteoartritis o tendinitis y distención muscular, entre otros.
Hay algunos signos que evidencian molestia en las articulaciones, como inflamación, temperatura elevada en el área, sensibilidad, enrojecimiento y dolor con el movimiento.
Existen algunas malas prácticas que pueden llevar a dañar o incrementar los dolores en estas partes del cuerpo, que son clave para poder realizar todo tipo de movimientos.
Una de ellas es la ingesta de una mala alimentación. Un consumo elevado de alimentos ricos en grasas es una de las principales causas que provocan daño en el organismo, especialmente en los huesos. Puede promover déficit de nutrientes esenciales y, además, otros problemas de salud, como la obesidad, asegura el portal Mejor con Salud.
Por ello, además de mejorar en la alimentación y seguir una dieta especial, es necesario añadir algunos alimentos que mejoren y combatan el dolor articular. De acuerdo con Medline Plus, la gelatina es ideal, pues contiene aminoácidos que fortalecen y dan estructura al sostén de los músculos y huesos, aliviando el dolor.
Modo de preparación de la gelatina
Ingredientes
- 150 gramos de gelatina sin sabor.
- 1/4 de taza de agua fría.
Preparación
- En un recipiente, agregar dos cucharadas de gelatina y el agua.
- Revolver y dejar reposar en la nevera.
- Al día siguiente, la gelatina estará sólida y lista para consumir.
- Comer en ayunas, media hora antes del desayuno.
- Si es de preferencia, se puede agregar miel o yogur.
Alimentos que ayudan a aliviar el dolor
Hay un sinnúmero de alimentos que contribuyen a la salud de las articulaciones, sobre todo aquellos con propiedades antiinflamatorias. Las frutas ricas en vitamina C, como la naranja, el kiwi, la papaya, la piña, la fresa o el limón, son ideales para los pacientes con estas dolencias, pues son una gran fuente de antioxidantes que ayudan a sostener la fortaleza del sistema inmunológico, además de proveer de colágeno al organismo.
La ingesta de cerezas es conveniente. De acuerdo con la fundación estadounidense Arthritis Foundation, esta fruta es una gran fuente de antocianinas, unos pigmentos a los que se les atribuyen importantes capacidades antiinflamatorias.
Es de mencionar que las antocianinas se encuentran en otras frutas de color rojo y morado, como fresas, frambuesas, zarzamoras y arándanos. “Sin embargo, las cerezas agrias contienen los niveles más elevados”, destaca.
El brócoli, las coles de Bruselas y el repollo también son recomendados por la fundación: “Estas verduras forman parte de la familia de los crucíferos y están repletas de un compuesto llamado sulforafano, que ayuda a retrasar el daño al cartílago en las articulaciones con osteoartritis, según un estudio con ratones del 2013″. La col rizada (berza) y la coliflor son otros alimentos ricos en sulforafano.
La cúrcuma posee propiedades antiinflamatorias que ayudan a las dolencias articulares. De acuerdo con Arthritis Foundation, la curcumina, un compuesto presente en la cúrcuma, puede ser útil para el manejo de enfermedades articulares inflamatorias crónicas, según un artículo de International Journal of Molecular Sciences del 2012.
Por último, está el ajo, miembro de la familia alliaceae, que incluye a cebollas y puerros. Estos alimentos poseen un compuesto llamado disulfuro de dialilo que ayuda con el tratamiento de distintos trastornos, incluyendo artritis. “Las personas que lo consumieron regularmente mostraron menos evidencia de OA de cadera en imágenes de rayos X, según un estudio realizado en 2010. Se piensa que el disulfuro de dialilo limita el daño de las enzimas que destruyen el cartílago”, señala la fundación.