El dolor suele ser una señal que emite el sistema nervioso de que algo está mal en el organismo. Esta sensación desagradable puede producir hinchazón, pinchazos, hormigueo, picaduras o molestias en el cuerpo que pueden ser agudos.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, Medline Plus, el dolor agudo es un tipo de dolor que puede durar varias semanas, meses o incluso años y la causa de esto puede ser enfermedades degenerativas como las artritis o el cáncer. En algunos casos, los factores ambientales y psicológicos pueden empeorar el dolor crónico.
Este problema de salud suele padecerlo en mayor medida las mujeres adultas que los hombres, pero algunas personas pueden tener dos o más enfermedades que causan el dolor crónico. Como tal, este tipo de dolor no siempre es curable, pero existen tratamientos médicos que pueden aminorar los síntomas que ocasiona, como lo son el consumo de analgésicos, terapia física y en algunos casos, la cirugía.
Adicionalmente, existen esencias naturales que también funcionan como coadyuvantes al tratamiento médico. Por ejemplo, la revista Mejor con Salud destaca las propiedades antiinflamatorias, analgésicas, antimicrobianas y antioxidantes del aceite esencial de noroli. Este producto, que también se conoce como aceite de azahar, se obtiene a través de la destilación al vapor de las flores blancas y cerosas del árbol de naranjo amargo.
Para aliviar el dolor crónico, este aceite se usa de forma tópica y se cree también que reduce los síntomas de las lesiones musculares, los trastornos articulares y el dolor neuropático. Incluso, una investigación en ratas publicada en Journal of Natural Medicines, identificó que este aceite ayudó a disminuir la inflamación aguda y crónica. Además, exhibió propiedades analgésicas al reducir la sensibilidad central y periférica al dolor.
Asimismo, otro estudio compartido en Journal of Agricultural and Food Chemistry destacó que este producto también tiene potencial contra las enfermedades asociadas a la inflamación cuando se emplea como aditivo alimentario.
Componentes del aceite de noroli
- Limoneno (27,5 %).
- (E)-nerolidol (17,5 %).
- Alfa-terpineol (14 %).
- Alfa-terpinil acetato (11,7 %).
- (E,E)-farnesol (8 %).
Otros beneficios del aceite de noroli
- Menopausia: de acuerdo con un ensayo controlado aleatorio que fue divulgado a través de Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, se determinó que la inhalación de este aceite es beneficioso para las mujeres en la etapa de la menopausia. Como tal, su aplicación ayuda también a reducir los síntomas como el bajo sexual, la presión arterial alta y el estrés, equilibrando la concentración de cortisol y estrógenos en el organismo.
- Anticonvulsivo: en la medicina tradicional, el aceite esencial de noroli se utiliza como anticonvulsivo natura y su aplicación se asocia a equilibrar la actividad eléctrica del cerebro y a disminuir los temblores. Cabe mencionar que hasta el momento no hay evidencia científica en humanos sobre estos efectos; sin embargo, un estudio en ratas compartido en Natural Product Communications determinó que los compuestos biológicamente activos del aceite esencial de flores de C. aurantium (neroli) ejercen actividad anticonvulsiva.
- Previene el envejecimiento prematuro: su contenido de flavonoides, vitaminas, minerales y terpenoides benefician la salud de la piel. Como tal, su uso tópico se vincula con la protección cutánea y la prevención del envejecimiento prematuro. Específicamente, los flavonoides se vinculan a un efecto fotoprotector y previenen el envejecimiento celular. Por otra parte, las cualidades antimicrobianas y antifúngicas se vinculan a la prevención del acné y otras infecciones cutáneas. A su vez, nutre la piel y favorece el proceso de cicatrización.
Es importante tener en cuenta que el aceite esencial de neroli es seguro y bien tolerado si se emplea en aromaterapia, masajes y remedios tópicos. No obstante, su ingesta directa está desaconsejada, aunque industrialmente puede están incluidas en algunos productos. Adicional a ello, hay que evitarlo en los siguientes casos:
- Niños pequeños.
- Lesiones abiertas de la piel.