El proceso de cicatrización es la forma natural del cuerpo de sanar y reemplazar la piel perdida o dañada. Según Stanford Medicine, una cicatriz normalmente está compuesta de tejido fibroso y este tipo de protuberancias en la piel se pueden ocasionar por múltiples razones, entre ellas, ser el resultado de infecciones, cirugías, lesiones o inflamaciones de tejido.
Como tal, el aspecto final de una cicatriz depende de muchos factores, incluido el tipo de piel y la localización de la cicatriz en el cuerpo, la dirección de la herida, el tipo de lesión, la edad del afectado y su estado nutricional. Así las cosas, los expertos en salud son los que pueden determinar los procedimientos para reducir una cicatriz basándose en lo siguiente:
- Edad, estado de salud general e historia clínica.
- Gravedad y síntomas de la cicatriz
- Tipo y ubicación de la cicatriz
- Tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.
- Expectativas para la evolución de la afección
Sin embargo, con el paso del tiempo las cicatrices suelen desaparecer o también muchas personas suelen utilizar maquillaje para cubrirlas mientras se curan. Pero también existen aceites naturales que ayudan a acelerar el proceso de atenuar las cicatrices antiguas. Se trata del aceite de rosa mosqueta, el cual se obtiene a partir de las semillas de la planta silvestre rosa mosqueta, que es rico en ácidos grasos, como el ácido linoleico, además de la vitamina A y C.
Este aceite es capaz de reforzar la producción de colágeno y elastina, que fortalecen y dan firmeza a la piel, siendo también responsable de nutrirla profundamente. “También tiene efecto antioxidante y antiinflamatorio, que potencializa el proceso de cicatrización. El aceite también es una buena opción natural para reconstruir las hebras de cabello, promoviendo la hidratación capilar profunda”, indica Tua Saúde.
Respecto a las cicatrices antiguas, este aceite ayuda a reducir la pigmentación de la piel, minimizando la apariencia de ellas, así como de líneas finas en la piel. Asimismo, este también ayuda a prevenir el envejecimiento precoz de la piel, ya que la vitamina C presente en el aceite tiene acción antioxidante, que evita los daños causados por los radicales libres en las células de la piel.
¿Cómo usar el aceite de rosa de mosqueta?
Para el rostro
Ingredientes
- 5 ml de aceite esencial de rosa mosqueta;
- 20 ml de aceite de coco;
- 30 ml de cera de abeja;
- 1 ámpula de vitamina E;
- Recipiente o frasco de vidrio con tapa.
Preparación: en primer lugar, se debe colocar el aceite de coco y cera de abeja en un sartén y calentar en baño maría. Enseguida, mezclar estos productos con una espátula hasta que los dos ingredientes se mezclen. Después de que el aceite de coco y la cera de abeja estén mezclados, agregar el aceite de rosa mosqueta y la ámpula de vitamina E, mezclar bien y dejar enfriar.
“Esta crema puede aplicarse varias veces al día de acuerdo a la necesidad, siendo especialmente indicado aplicar en el rostro durante la noche antes de dormir”.
Para el cuerpo
El aceite de rosa mosqueta en el cuerpo se recomienda que se apliquen algunas gotas directamente sobre la piel, masajeando con movimientos circulares suaves durante dos a tres minutos hasta su completa absorción. “El aceite puede aplicarse una a dos veces al día, principalmente en las zonas más secas o con cicatrices, estrías, arrugas o líneas de expresión, por ejemplo, de acuerdo a la necesidad”, indica Tua Saúde.
Para el cabello
Lo ideal es usar todo este producto en el cabello, desde la raíz, aplicando algunas gotas en el cuero cabelludo, y masajeando con movimientos circulares por 5 minutos y por toda la extensión del cabello, pudiendo repetir al menos una vez por semana.