Los remedios caseros –muchas veces– resultan muy beneficios para aliviar o prevenir afecciones de salud. Las propiedades de plantas, semillas y otros productos contribuyen a mantener el organismo en buena condición, cuando no se trata de padecimientos graves.
Una de esas alternativas naturales es el agua de semillas de chía y limón. Estas semillas destacan por ser fuente vegetal de ácidos grasos poliinsaturados, en especial de ácido alfalinolénico (ALA), precursor vegetal del omega-3.
Su potencial antioxidante y sus efectos beneficiosos para ayudar a controlar la diabetes, el colesterol o la hipertensión y sus propiedades antiinflamatorias y laxantes, entre otras, están respaldados por la evidencia científica, según una revisión de estudios publicada en Journal of Food Science and Technology, precisa la nutricionista Carla Zaplana, en una publicación del portal Cuerpo & Mente.
Por su parte, el limón es un cítrico que ofrece bondades antioxidantes, reguladoras, inmunoprotectoras, coagulantes y oxigenantes, según el portal Nutrición y Farmacia de España.
Una de sus principales fortalezas es que es rico en vitamina C, tanto así que 100 mililitros de zumo casero aportan el 62 % de las necesidades diarias de este nutriente, asegura Cuerpo & Mente. Esta vitamina es fundamental para el buen estado de los vasos sanguíneos y clave para cuidar la salud de los huesos, los dientes y la piel, debido a la formación de colágeno, que contribuye al buen estado de la piel y de los cartílagos, así como a la favorable cicatrización de las heridas.
Sacia el apetito y ayuda a adelgazar
Al juntar estos dos ingredientes se potencian sus beneficios y pueden ser usados para diferentes fines. Uno de ellos es que ayuda a brindar saciedad, favoreciendo de esta forma la pérdida de apetito y, como consecuencia, contribuye a bajar de peso.
El agua de chía con limón actúa como un buen saciante y permite, junto con una alimentación equilibrada y variada, aguantar sin sentir hambre hasta las comidas principales, lo que evita que se esté picando entre horas, precisa una publicación de la revista Mejor con Salud, escrita por Valeria Sabater.
En esta línea, el portal de estilo de vida unCOMO indica que estas semillas tienen propiedades quemagrasa, lo que ayuda a acelerar el metabolismo y a evitar la acumulación de grasas dentro del organismo. De igual forma, tienen compuestos antioxidantes que previenen la formación y acumulación de grasas localizadas.
El limón, en tanto, es diurético, lo que ayuda a expulsar desechos del organismo; también tiene propiedades saciantes porque es rico en fibra, especialmente pectina y, además, es un fruto bajo en calorías, por lo que resulta un buen aliado de las dietas hipocalóricas.
Estos dos ingredientes también ayudan a purificar el estómago, debido a que son saludables para la digestión, gracias a que contribuyen a que los alimentos se digieran mejor. Así, hacen que los nutrientes se absorban de manera adecuada haciendo que las vitaminas y minerales lleguen al torrente sanguíneo con facilidad, indica Mejor con Salud.
¿Cómo prepararla?
Los pasos a seguir para elaborar esta bebida son muy fáciles. Esto es lo que propone la mencionada revista.
Ingredientes
- Una cucharadita de semillas de chía (5 g)
- Un vaso y ½ de agua (300 ml)
- Un limón
- Una cucharada de miel (25 g)
Preparación
- Lo primero que se debe hacer es dejar en remojo la cucharadita de semillas de chía con medio vaso de agua (100 ml) durante una hora. Esto permitirá que se ablanden y se forme un gel que es muy característico de este alimento.
- Luego se exprime un limón y se mezcla con el vaso de agua restante.
- Posteriormente, se junta todo: el agua con zumo de limón, con la que contiene las semillas.
- Se agrega a la licuadora o batidora y se puede endulzar con la miel. La idea es tomar esta mezcla todos los días en ayunas.