Las enfermedades cardiovasculares están asociadas a ciertos factores genéticos heredados o parcialmente adquiridos a lo largo de la vida, como lo es la diabetes, hipertensión arterial, obesidad, colesterol malo; así como también factores ambientales.
De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unido, una de las afecciones que deteriora con más frecuencia la salud cardiovascular es el accidente cerebrovascular (ACV), el cual es causado por la falta de flujo sanguíneo en el cerebro. Como tal, esto sucede debido a un coágulo de sangre que se aloja en los vasos sanguíneos y obstruye el flujo regular de la sangre hacia el cerebro.
Así las cosas, un ACV se presenta cuando un vaso sanguíneo en el cerebro se rompe, causando un sangrado dentro de la cabeza. Existen dos tipos principales, el accidente cerebrovascular isquémico que ocurre cuando un vaso sanguíneo que irriga sangre al cerebro resulta bloqueado por un coágulo de sangre; y el accidente cerebrovascular hemorrágico que se presenta cuando un vaso sanguíneo de una parte del cerebro se debilita y se rompe.
Los factores de riesgo que aumentan la posibilidad de padecer esta patología son la diabetes, ser hombre, colesterol alto, aumento de la edad, especialmente después de los 55 años, obesidad, antecedentes familiares de la enfermedad, frecuencia cardíaca irregular, llamada fibrilación auricular, entre otros.
Para prevenir esta grave enfermedad y cuidar en general el sistema cardiovascular, es fundamental tener buenos hábitos de vida como una alimentación saludable rica en vitaminas y minerales, así como una buena actividad física. Frente a la alimentación, existente algunos que son energéticos como el maíz, un cereal muy completo que favorece en general el organismo.
Este superalimento contiene vitamina B1, la cual disminuye la homocisteína y, por lo tanto, reduce también el riesgo de sufrir un ataque cardiovascular. También es rico en ácido fólico y otras vitaminas, lo que lo convierten en un cereal muy apetecido para aumentar las funciones del cerebro.
Asimismo, los expertos señalan que las fibras insolubles de este alimento favorecen la absorción de grasa a nivel intestinal, disminuyendo así la concentración de colesterol malo en la sangre.
Por otra parte, el portal web La Vanguardia señala que el maíz es una fuente de antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres y el envejecimiento celular. Del mismo modo, su efecto saciante gracias a su alto contenido de fibra e hidratos de carbono ayudan a controlar el apetito y esto hace que se mitiguen problemas como el sobrepeso o la obesidad.
Otros beneficios del maíz
El portal web Tua Saúde da a conocer otros beneficios para la salud que aporta el consumo regular del maíz:
- Mejora la salud visual: gracias a su contenido de zeaxantina y luteína, los cuales tienen una acción antioxidante, ayudan a proteger los ojos de daños causados por los rayos UV, previniendo así las cataratas o la degeneración macular.
- Fortalece el sistema inmune: su contenido de betacaroteno ayuda a aumentar las defensas del cuerpo, reduciendo la duración de enfermedades como los resfriados o gripas simples.
- Aumenta la energía: sus carbohidratos son nutrientes esenciales que ayuda a proporcionar mayor energía al cerebro y en general a todo el cuerpo.
- Mejora el tránsito intestinal: las fibras que contiene el maíz favorecen la formación de las heces, estimulando los movimientos del intestino y facilitando su evacuación.
De otro lado, la forma de consumir este alimento es hervido o asado, según la preparación que se quiera hacer. Con este alimento también se pueden hacer ensaladas, sopas o palomitas de maíz.
“Además, el maíz también se encuentra en forma de harina, que se puede utilizar para preparar polenta, pan, pastel y cuscús. También es posible extraer su aceite, que se utiliza ampliamente para freír o saltear alimentos”, indica Tua Saúde