El cartílago es el tejido firme, pero flexible, que cubre los extremos de los huesos en una articulación. También da forma y apoyo a otras partes del cuerpo, tales como a las orejas, la nariz y la tráquea, precisa MedlinePLus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

El cartílago sano ayuda a moverse al permitir que los huesos se deslicen por encima de los otros y los proteje impidiendo que se froten entre sí. Así mismo, es el encargado de disminuir las probabilidades de que una persona padezca de lesiones articulares, asegura el portal Fisioterapia Online.

Es recurrente que con el paso del tiempo y el avance de la edad, los cartílagos enfrenten desgaste y también se lesionen. Los expertos indican que un cartílago lesionado, inflamado o dañado puede causar síntomas como dolor y limitación del movimiento. Uno de los más expuestos es el de la rodilla.

El avance de la edad y algunas afecciones hacen que el cartílago de la rodilla se desgaste. | Foto: Jan-Otto

También puede conducir a daños articulares y deformidad. Entre las causas de problemas en los cartílagos se encuentran las rupturas y lesiones causadas por la práctica de deportes, factores genéticos y otras tras enfermedades, tales como algunos tipos de artritis, precia Medline Plus.

Si bien existen tratamientos médicos para regenerarlos, también se puede mejorar su condición con la ingesta de ciertos nutrientes que ayudan tanto a fortalecer como a prevenir que la densidad del cartílago se reduzca y uno de eso alimentos es el pescado azul.

Pescado azul para el cartílago

Este tipo de pescado es rico en ácidos grasos omega-3, nutriente saludable para las articulaciones, además de que contiene colágeno que reduce el desgaste articular. Hay investigaciones en las cuales se ha concluido que las personas que presentan dolencias y consumen de manera regular este alimento mejoran su calidad de vida, gracias a sus propiedades antiinflamatorias.

El salmón es uno de los pescados azules que se debería incluir en la dieta de forma regular. | Foto: Getty Images

En la lista de opciones que se pueden incluir en la dieta están el atún, el salmón, las sardinas y la trucha, que son de las especies más recomendadas para los pacientes que sufren de artritis y otras enfermedades degenerativas.

Una de las recomendaciones importantes a la hora de consumirlo es que no sea frito. Con este método de preparación, el alimento pierde una buena cantidad de sus propiedades como los ácidos grasos.

Por ser un producto rico en vitaminas y minerales, el consumo habitual de pescado también resulta útil para aquellas personas que no tienen artrosis, pero que presentan otros inconvenientes en sus rodillas. Se aconseja comer por lo menos una o dos porciones a la semana.

Otros alimentos que no deberían faltar en la dieta

Las espinacas son saludables para las articulaciones. | Foto: Getty Images
  • Gelatina: Este es uno de los productos más ricos en colágeno que, como ya se ha mencionado, es una proteína muy importante para los tejidos, entre ellos los cartílagos, así como para los tendones y huesos. Lo ideal es consumirla sin sabor y no con aditivos.
  • Naranjas: Un estudio publicado en el Journal of Epidemiology determinó que estas frutas son efectivas para proteger las articulaciones y regenerar el cartílago, según menciona una publicación de la revista Artritis y Reumatología. Esto se debe a su riqueza en vitamina C, un nutriente clave para fortalecer el cartílago y mejorar la condición de las articulaciones, indica el portal Salud 180. Esta vitamina, además de ser antioxidante, favorece la producción de colágeno, que es clave para fortalecer estas partes del cuerpo.
Las naranjas son ricas en vitamina C que ayuda a producir colágeno, proteína clave para proteger el cartílago. | Foto: Getty Images
  • Vitamina D: Según el portal de estilo de vida unCOMO, este nutriente es un buen aporte para evitar que el cartílago pierda tejido fibroso, ya que mejora la movilidad de las articulaciones y favorece la recuperación de algunas lesiones, aliviando síntomas como el dolor muscular y el dolor de las rodillas.